Para muchos migrantes latinoamericanos, la posibilidad de solicitar asilo en Estados Unidos quedará a partir de ahora un poco más lejos de la frontera estadounidense y quizá más cerca de su país de origen.
Este jueves, el gobierno del presidente Joe Biden anunció la próxima apertura de centros de procesamiento de migrantes en Colombia y Guatemala.
Con esto se busca evitar el aumento del flujo de migrantes en la frontera sur con México, así como el peligroso recorrido que miles de estas personas realizan para llegar allí, en ocasiones teniendo que cruzar la temida selva del Darién.
La medida, anunciada por el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, se produce unas pocas semanas antes de que expire el llamado Título 42, una disposición de la era Trump que permite rechazar a los inmigrantes sobre la base de preocupaciones de salud pública y que en la práctica permite mantener un cierto blindaje de las fronteras estadounidenses.
Esa normativa estará vigente hasta el próximo 11 de mayo, lo que genera mucha preocupación entre las autoridades estadounidenses ante la posibilidad de que los puestos de control fronterizos se vean desbordados por una gran cantidad de solicitantes.
«Que quede bien claro: nuestra frontera no está abierta ni lo estará después del 11 de mayo«, dijo Mayorkas durante la rueda de prensa en la que anunció algunas medidas que están tomando de cara al fin del Título 42, por el cual EE.UU. ha realizado más de dos millones de expulsiones de migrantes en su frontera.
Pero ¿qué se sabe sobre estos centros de atención al migrante?
Gestionados por organizaciones internacionales
Mayorkas dijo que los centros en Guatemala y Colombia deberán estar en funcionamiento en las próximas semanas.
Se espera, además, que se anuncie el establecimiento de instalaciones de este tipo en otros países de América Latina que no han sido identificados todavía.
Sin embargo, de acuerdo con un documento obtenido por el medio Político se cree que podría haber un centro de estos en Ecuador y, probablemente, en Costa Rica.
Mayorkas dijo que espera que estos nuevos centros procesen al menos entre 5.000 y 6.000 migrantes cada mes.
El funcionario agregó que la idea es contactar a las personas donde están, sacando de juego a los traficantes y evitando que los migrantes tengan que hacer la peligrosa ruta hacia EE.UU.
Los centros de migrantes van a estar gestionados por organizaciones internacionales aliadas de Estados Unidos como la Oficina de la ONU para los Refugiados (Acnur) o la Organización Internacional de Migraciones.
Estas organizaciones van a hacer una evaluación de los migrantes para determinar si cumplen con los requisitos exigidos para ir a EE.UU.
En los casos afirmativos, los migrantes serán referidos para que sean admitidos en un campo de refugiados o para que sean procesados a través de algún otro mecanismo legal existente como los programas de reunificación familiar, los permisos de estadía (parole) o las admisiones con fines de trabajo.
Los gobiernos de España y Canadá han indicado su disposición a recibir a personas referidas por estos centros de procesamiento.
Una de varias medidas
Las autoridades estadounidenses han señalado que la apertura de estos centros es solamente una de varias medidas que están tomando para gestionar la migración y han dicho que también ampliarán el programa de reunificación familiar -existente para cubanos y haitianos- para incluir a guatemaltecos, colombianos, hondureños y salvadoreños.
También aumentarán el número de solicitudes disponibles a través de la app CBP One, actualmente usada para gestionar los trámites de migrantes en el norte de México.
A la par de estas medidas para facilitar y ampliar la entrada de migrantes, las autoridades estadounidenses de EE.UU. aplicarán también una nueva regla que prohibirá solicitar asilo a quienes crucen la frontera ilegalmente.
Además, ampliarán el proceso de expulsión expedita aplicable a todo aquel que no sea capaz de demostrar una razón legal para permanecer en el país.
Maryorkas explicó que quien sea expulsado bajo esta normativa -conocida como Título 8- tendrá prohibida la entrada a Estados Unidos por cinco años.