Barcelona.-A tres días de que el Senado español apruebe la intervención del autogobierno de Cataluña para atajar una posible secesión, Madrid y Barcelona mantenían ayer un tira y afloja ante una posible comparecencia del presidente regional catalán en la Cámara Alta.
A pedido del gobierno conservador de Mariano Rajoy, el Senado debe dar luz verde el viernes a unas medidas sin precedentes en 40 años de democracia, decididas al amparo del artículo 155 de la Constitución española, que incluye la destitución en bloque del ejecutivo regional, que preside Carles Puigdemont.
En tanto, el ex primer ministro francés nacido en Barcelona, Manuel Valls, planteó que la independencia de Cataluña abriría “la caja de Pandora de la dislocación de Europa”.
“Los dirigentes europeos y los franceses como yo, deben decir que hay un verdadero peligro para la Unión Europea y es por eso que hay que apoyar al gobierno español”, agregó.