Lluvias sobre la presa de Tavera mantienen bajo alerta al Cibao

Lluvias sobre la presa de Tavera mantienen bajo alerta al Cibao

Lluvias sobre la presa de Tavera mantienen bajo alerta al Cibao

Foto de archivo

Santo Domingo.-Los daños causados por las inundaciones tras 40 días de lluvias sobre el territorio nacional han dejado pérdidas que superan los 20 mil millones de pesos, y todavía continúan las precipitaciones.

El ministro de Obras Públicas, Gonzalo Castillo, dijo que solo en esa institución los gastos corrientes y operativos se han incrementado entre 90 y 100 millones de pesos en las últimas tres semanas.

Aseguró que el Gobierno está trabajando como un solo equipo para preservar vidas, realizando las evacuaciones de lugar y llevando alimentosa todas las provincias en alerta.

En alerta por la presa…

Sin embargo, ante este panorama la situación está empeorando a cada hora, ya que las lluvias continúan sobre la presa de Tavera, que desde el martes está operando a su nivel máximo.

Se prevé que producto del desagüe del referido embalse el caudal de río Yaque siga creciendo.

Hasta ayer tarde se vertían 412.37 metros cúbicos de agua por segundo a ese afluente, pero la presa recibía 450.8, lo que no ayudaba a estabilizarla a sus niveles normales.

Los datos fueron especificados por Luis Cuevas, vocero del Comité de Presas y Embalses, quien dijo que esperan que las condiciones mejoren.

Recordó que la presa de Tavera tiene una capacidad de 20 millones de metros cúbicos y “en las condiciones actuales, a excepción de una lluvia fuerte en la cuenca, no representa peligro”.

Pero desde ya esta situación ha provocado inundaciones en decenas de comunidades que se encuentran en las riberas del Yaque, tanto en Santiago como en Valverde y Montcristi.

En Gurabo decenas de casas han sido inundadas. Lo mismo ocurre en otras localidades de Santiago, donde las personas han dejado sus hogares.
En Montecristi, provincia donde desemboca el Yaque, los mayores efectos se están sintiendo en Palo Verde. A parte de los desplazados las pérdidas agrícolas son millonarias.

Allí la Defensa Civil procedió a desalojar de emergencia y de forma obligatoria a los lugareños para evitar tragedias.

Fuera de control

No obstante, incidentes como la muerte de tres miembros de una misma familia por el desplome de un árbol en Salcedo, parecen escapar al control de los organismos de socorro.

Los hermanos Katherine y Carlos Martínez, de 15 y 16 años, se encontraban durmiendo junto a su padrastro Leudy Santana, cuando la muerte los sorprendió.

De la familia solo salieron ilesos otros dos menores y Raisa Martínez, madre de los adolescentes fallecidos.

“¡Ay mis niños!, que voy hacer yo sin ustedes y sin mi marido”, gritaba desconsolada Martínez, mientras los cadáveres eran velados a pocos metros de donde ocurrió el suceso en el barrio Las Flores.

La casa en que dormían las víctimas quedó hecha pedazos por el árbol de javilla, cuyo tronco es de aproximadamente un metro de ancho.

El colapso fue producto de las intensas lluvias y la cercanía de la vivienda afectada por las aguas del río Juana Núñez, que ha experimentado un crecimiento inusual.

Vecinos aseguraron que las víctimas estaban censadas por el gobierno para ser desalojadas desde hace varios meses y que los apartamentos están terminados, pero no se los entregaron.

La caída del árbol afectó otras viviendas.

Al menos seis personas han perdido la vida en las últimas semanas producto de las lluvias.

Algunos de esos decesos fueron producto de la falta de precaución ante las advertencias.

Informe del COE

Aunque las lluvias se han sentido con mayor intensidad en el Cibao, en la región Este también se han reportado inundaciones y otros daños.

El Centro de Operaciones de Emergencias informó que el número de desplazados a nivel nacional ascendió a 14, 710.
Un total de 103 viviendas fueron destruidas totalmente y otras 2,768 estaban afectadas.

Por otro lado, el número de comunidades incomunicadas era de 54 y 4 puentes presentaban daños considerables.
De total de desplazados 382 estaban en albergues.