Lluvias en el sur dejan cientos de refugiados

Lluvias en el sur dejan cientos de refugiados y zonas incomunicadas

Lluvias en el sur dejan cientos de refugiados y zonas incomunicadas

Árbol que cayó próximo a la carretera Sánchez, afectando un vehículo. duany núñez

Santo Domingo.-El paso de la tormenta Franklin por la región sur del país provocó el desplazamiento de familias, hogares sin energía eléctrica por la caída de postes, mientras la crecida de algunos ríos dejó al menos cuatro comunidades incomunicadas y varias viviendas anegadas.

En la provincia sureña de Azua, las lluvias fueron de moderadas a fuertes en ocasiones, causando que las localidades de Las Guamas, El Recodo y Arroyo Corozo en Guayabal, Padre Las Casas, quedaran incomunicadas por la crecida del Río Las Cuevas, según informó el director regional de la Defensa Civil, Sócrates Urraca.

Al acercarse a esta zona, comunitarios de otras localidades en Guayabal, hacían la advertencia de no cruzar el río debido al aumento de su caudal, lo que mantenía a los residentes del otro lado del puente sólo observando, sin poder cruzar a donde pueden abastecerse de alimentos.

Señora llevaba comida a su hija en sector con calle inundada.

Usidín Taveras, de La Joya, en el referido municipio, explicó que estos vecinos ya están acostumbrados a la situación, por lo que antes de las lluvias tratan de asegurarse con lo necesario para comer por varios días.

Bajo control
El alcalde del municipio cabecera, Ruddy González, dijo que hasta ayer en la tarde todo estaba controlado; los ríos habían mantenido sus caudales, con excepción de río Las Cuevas y no se habían producido inundaciones.

Sin embargo, las calles tanto principales como del sector La Bombita, estaban cual ríos, por encima, en algunos casos, de las aceras.

Historial inundación
En el distrito municipal de El Rosario, unas 38 familias que llegaron con ropas, sábanas y alimentos, seguían albergadas ayer a modo de prevención por las lluvias, ya que esa localidad tiene historial de inundaciones.
Y es que la experiencia con este tipo de situaciones lleva a personas como Mayra Decena, a esperar que las autoridades anuncien que ha pasado el peligro para poder regresar a sus hogares.

“A nosotros nos ha sucedido eso muchas veces, que nos hemos ido para la casa sin todavía esperar y cuando llegamos allá tenemos que volver a salir corriendo cuando el río allá entra para la casa”, explicó Decena, quien tiene toda su vida residiendo en El Rosario y viendo como el río Tábara junto a dos cañadas suelen inundar la zona.

González indicó que se habían caído árboles y postes del tendido eléctrico. Esto provocó que el municipio de Peralta quedara sin energía.

Mayor acumulado agua
Barahona y San Cristóbal son las zonas que más acumulados de agua había recibido desde el martes hasta el miércoles en la mañana, según la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet).

El observatorio meteorológico del Aeropuerto de La Romana reportó un valor acumulado de lluvia importante en Los Cajuiles de Barahona, con unos 270 milímetros de agua.

Personas que se encontraban en albergues desde el pasado martes en El Rosario, Azua.

Los Cocos, de Enriquillo, en Barahona, que fue la comunidad por donde ingresó la tormenta Franklin al país, sufrió inundaciones, dejando familias con sus ajuares mojados.

Durante la mañana de ayer, 35 familias habían sido evacuadas en Polo y Fondo Negro, en Barahona.

Inundaciones urbanas
En tanto que, en San Cristóbal, se produjeron inundaciones urbanas en lugares como la calle 30 de Marzo próximo a la autopista Duarte en Villa Altagracia, dejando 15 viviendas anegadas e igual número de desplazados a casas de familiares y amigos.

También en la comunidad La Represa se cayó un árbol, derribando un poste del tendido eléctrico.
Asimismo, debido al desbordamiento del arroyo Pozo Prieto en Najayo Arriba incomunicando el sector de Pozo Prieto.

El martes, en San Cristóbal realizaron evacuaciones de personas de manera obligatoria.
Trayecto sur
En cuanto a la carretera que comunica las provincias del sur del país con Santo Domingo, esta se encontraba desértica, es decir, con pocos vehículos privados y del transporte colectivo transitando por las vías.

Los comercios, en su mayoría, permanecieron cerrados al público, mientras algunas personas, sobre todo jóvenes, aprovecharon para bañarse bajo la lluvia en las comunidades sureñas.

En San José de Ocoa, la carretera en el cruce sufrió daños con el colapso de una orilla del puente, cercano a la localidad Vuelta de la Paloma.

Albergues

— Buscar ayuda
La intensidad de las lluvías fue el recordatorio perfecto para que residentes en zonas vulnerables acudieran a los diferentes refugios, pero hubo casos en lo que tuvieron que hacer evacuaciones obligatorias.