Liderazgo y reformas

Liderazgo y reformas

Liderazgo  y reformas

Franklin Puello

Fue el pasado lunes que el Gobierno hizo oficial la convocatoria al liderazgo político, social y económico para discutir la agenda de doce reformas que fueron planteadas por el presidente Luis Abinader en su discurso ante la nación, el miércoles de la semana pasada, con motivo de su primer año de gestión.

No son iniciativas nuevas, porque tienen décadas en la discusión nacional y siempre se han quedado sobre la mesa.

Lo importante no es que el Gobierno convoque a los líderes de todos los estamentos del país, sino que haya un desprendimiento para llegar al consenso necesario sobre los temas cardinales de la agenda nacional.

Las reformas sugeridas por el presidente Abinader versan sobre el transporte y el agua, de la Policía Nacional, del sector eléctrico y de la transparencia y la institucionalidad.
Lo nuevo sería, entonces, que el Gobierno y el Partido Revolucionario Moderno permitan que el liderazgo nacional tenga la oportunidad de esbozar los planes y los alcances de estas reformas por el bien del país.

Como bien dijo en su discurso el propio mandatario, hay que dejar las diferencias políticas. A esto hay que agregar también que “hay que dejar los intereses económicos y particulares” para que se pueda llegar al consenso que desean el Gobierno y todo el país.
Puntos cardinales en esas discusiones serían lo referente a la reforma fiscal y al tema de la Constitución, por su sensibilidad en materia económica y su repercusión en la esfera política.

Lo que se espera es que todos los sectores asuman el compromiso de desprenderse de las cuestiones particulares o de carácter político-partidario para llegar al consenso que se requiere para que el país pueda encausarse por las sendas del progreso y del bienestar colectivo.