El Latinobraómetro es una ONG sin fines de lucro con sede en Santiago de Chile. Esta institución se ha dado a la tarea de recopilar datos de diversos países y de diversas fuentes, con el fin de desarrollar el informe que hoy conocemos como Latinobarómetro.
La fuente de datos del informe en cuestión para dar a luz sus resultados en lo relativo a la República Dominicana es la CID-GALLUP, utilizando una muestra de 1,000 entrevistados con un error muestral de +/- 3.1, entendiendo que los datos recopilados representan el 100% de la población.
Otro punto importante sobre los datos del Latinobarómetro es que el 79.3% de las preguntas son opiniones de los encuestados y solo el 20.7% son factores reales, por lo que es preferible que este informe se tome como referente de la percepción de la zona latinoamericana.
El informe aborda la valoración de la democracia por parte de los dominicanos.
La democracia ha sido la forma de gobierno que actualmente se utiliza con mayor frecuencia alrededor del mundo, la cual desde sus cimientos busca que el pueblo tenga voz y voto sobre cómo quiere que su nación sea guiada.
Pero ¿qué piensan los dominicanos sobre este sistema y sobre su contraparte más reciente, los regímenes autoritarios?
Según los datos del Latinobarometro el 44% de los dominicanos dice que apoya la democracia por encima de todas las otras opciones, mientras que el 29% es indiferente ante un régimen democrático o uno autoritario y solo el 18% prefiere un gobierno autoritario.
Es preciso resaltar que respecto al año pasado el apoyo a la democracia se redujo en un 10%, lo cual indica un fuerte descontento ante la situación actual respecto a este sistema.
Según el informe, esta reducción en el apoyo a la democracia más que transformarse en un apoyo al régimen autoritario se ha convertido en indiferencia sobre cuál régimen utilizar.
Todos los partidos deben ver esto con un grado de alarma, ya que un declive en el apoyo a la democracia no solo afecta al gobierno, sino a todos los partidos por igual, dando a entender que el pueblo no se encuentra conforme con el marco político del sistema actual.