Frederich E. Bergés
El Ministro de Hacienda, Lic. José Manuel (Jochy) Vicente, recién tuvo una importante comparecencia en un evento público de corte económico en el que pronunció importantes palabras
En líneas generales una parte importante de su exposición giró en torno al actual desequilibrio fiscal y lo que entiende son sus principales causantes. Esta disertación reviste de importancia por cuanto puede estar, de manera velada, revelando los próximos pasos económicos del Gobierno si el mismo se reelige.
Para el año venidero 2024, el Presupuesto general de la nación contempla una estructura en la cual los gastos de capital, o sea inversiones, representarán apenas el 11.4 % del total de ingresos ordinarios.
Esto es debido a que los gastos corrientes se llevarán el grueso de los ingresos, equivalentes a un 88.6 % del monto total. Peor aun, del total de gastos corrientes, se estima que a educación se destinará el 26%, a la deuda publica otro 26 % y para el subsidio eléctrico un 8 %.
En ningún momento escuchamos referencias al control de gastos o al crecimiento de la burocracia, nómina y prebendas. Hay partidas de gran ineficacia, como son los fondos destinados a la educación y otros de gran despilfarro como el sorprendente monto destinado por las diferentes oficinas y dependencias a su publicidad, publicaciones y eventos.
Lo que si se destacó es la baja carga fiscal argumentando la necesidad de una estructura tributaria más equitativa y menos dependiente de exenciones.
Hay partidas que han estado bajo la lupa pública, como las exenciones otorgadas a la industria del cine y del entretenimiento o el caso del turismo, para solo citar dos ejemplos. Para el 2024 tenemos un Presupuesto en el cual los gastos exceden en un 20 % los ingresos.
Todo lo anterior evidencia de manera clara que el próximo plan económico se basará en una estructura fiscal revisada, donde lejos de controlarse los gastos, surgirán algunos nuevos impuestos, eficientización de otros, y un claro accionar de recorte en el tema exenciones. Todo un 2024 post electoral con desafíos que requieren soluciones justas y eficaces.
