Siempre les digo a mis pacientes que los dientes son órganos, son parte importante del cuerpo, el cuerpo es un sistema que debe estar en equilibrio, si en alguna zona está desequilibrado eventualmente se verán afectadas otras zonas.
Estudios científicos hablan de que las bacterias patógenas circundantes en la boca viajan a través del torrente sanguíneo y pueden causar enfermedades como nefritis, así como también reumatismos y artritis sépticas ya que, pueden llegar a las articulaciones. En algunos casos se desarrolla una endocarditis afectando las válvulas cardíacas del corazón; las bacterias pueden alcanzar el estómago provocando irritaciones estomacales o gastritis. Los pacientes con encías enfermas tienen más probabilidades de padecer un accidente cerebro vascular que aquellos pacientes con encías sanas. En caso de que las infecciones bucales que se encuentran cerca de los senos maxilares aumenten su destrucción ósea podrían ocasionar sinusitis.
En personas diabéticas las infecciones no tratadas de la boca podrían empeorar su condición.
Aunque es menos común, pero también es posible que los pulmones se vean afectados por la aspiración de microorganismos orales.
En mujeres embarazadas que no tengan una buena salud bucal, las bacterias patógenas pueden infectar la placenta, aumentando el riesgo de parto prematuro hasta un aborto no deseado.
La boca no es una armario independiente de nuestro cuerpo el cual podemos cerrar y postergar sus necesidades para cuando estemos dispuestos a hacerlo. El no prestarle atención a tu realidad bucal podría traerte serias complicaciones de salud general.
Dios te bendiga abundantemente.