La Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) ha jugado un rol estelar en el desarrollo económico nacional. Su carácter nacional le permite funcionar en las 32 provincias del país a través de recintos, centros y subcentros.
La UASD tiene una excelente oportunidad de seguir contribuyendo al desarrollo nacional y a la transformación del actual modelo económico y social. ¿cómo puede la UASD contribuir a eso?
Ahora que los Estados Unidos está revisando su industria de semiconductores debido a la ventaja relativa de sus competidores en industrias claves, especialmente China, ha decidido hacer grandes inversiones en la industria de semiconductores.
Los Estados Unidos ha asignado mucho dinero para el fomento de esa industria. La respuesta más visible es la Ley CHIPS, que asigna US$39 mil millones de dólares en fondos gubernamentales para instalaciones de fabricación de semiconductores nacionales y miles de millones más para investigación y desarrollo (I+D) de semiconductores y programas de fuerza laboral.
Para esto han establecido como estrategia involucrar a países cercanos a la región como mecanismo de producir en lugares cercanos (Nearshoring) y de garantizar cierta seguridad en la cadena de suministros de los semiconductores.
La UASD a través de su Facultad de Ingeniería y Arquitectura, y su envidiable Laboratorio Tecnológico, el más avanzado de la Región del Caribe, puede formular un plan de capacitación (cursos, diplomados, especialidad) en fabricación de semiconductores con la ayuda y cooperación técnica de los Gobiernos de Corea del Sur y Japón.
Esto crearía capacidades en materia de recursos humanos e impulsaría una industria naciente o especie de clúster de zona franca tecnológica para el fomento de las exportaciones de semiconductores hacia el mercado norteamericano.
Los semiconductores son el elemento vital de la economía digital.
La industria de los semiconductores ha pasado a ocupar un lugar central en el discurso político, tanto en Estados Unidos como en otros países.
Por eso, la UASD tiene la gran oportunidad de seguir contribuyendo con la formación de “recursos humanos claves” para el desarrollo económico del país.