Porque…”No me avergüenza confesar la
Ignorancia de lo que no sé”
Los sabios tienen sobre los ignorantes
las mismas ventajas que los vivos
sobre los muertos.
Aristóteles.-
Yo exijo y tú no me haces caso. Otros piden y tú, impertérrito, no te conmueves. No hay dolor ni sentimiento alguno hacia el sufrir ajeno y hasta tus comunes orígenes son olvidados exprofeso. Clamo y mi clamor se lo lleva el viento, como en los tiempos de la esclavitud, donde el dolor o deseo del esclavo en vez de consuelo o ayuda recibía más castigos. Algo así como en las tiranías o dictaduras donde solo los adláteres tienen derecho, una similitud increíble con las condiciones en las que vive la sociedad dominicana,
Muchos tienden a rezar e inclinan la cabeza y se arrodillan, creyendo que con esto resolverán la situación y no es así. Al César lo del César, supuestamente dijo el propio Señor entonces,pero no se puede clamar al cielo en busca de solución con algo que es completamente terrenal.
Valor y vergüenza contra el absolutismo es la solución, no otra. Ya sea dialogando o peleando, pero hacerlo porque ya no basta con rezar. Lo peor de lo peor se ha hecho cargo del quehacer político. Mediocres, abogados inescrupulosos y guardaespaldas se reparten las instituciones nacionales, aún por encima de los deseos de un Presidente. Así estamos.
El amigo periodista José Báez Guerrero escribió que “el ser político implicaba tener alguna idea de bien Patrio y buscar el apoyo de los votantes para realizarla desde el poder”, pero no han elaborado documento alguno que los obligue a honrar sus compromisos y mucho menos ha existido la responsabilidad, la moral y el sacrificio para cumplir. Y todo porque los partidos se han convertido en el refugio de depredadoresy oportunistas que cualquerizan todo lo que tocan, que además-cuando no encuentran carroñas dentro de ellos mismos- hacen sus propias madrigueras o grupos políticos para repartirse como parcelas hasta los estamentos judiciales, todo en busca de impunidad y blindaje para sus descaradas acciones vandálicas.
Se dice que la humillación deshonra, tanto al que la ejecuta como en quien recae, y de así ser y así es, este pueblo no tiene honra, porque se ha acostumbrado a vivir humillado por las acciones ofensivas y abusivas que día a día llevan a cabo esta horda de cualquerizados, constituyendo lo peor del todo, que no hay justicia que sirva de árbitro, que imponga sanciones, porque por igual ella ha sido ultrajada, aprisionada en las garras de espurios intereses para lo cual le han quitado la venda para que pueda ver a quién o contra quien actuará, convirtiéndola en una caricatura dentro de la llamada democracia para que se encargue de justificar sus desmanes.
Solo los pendejos y carentes de todo llenannuestras cárceles mientras una élite corrupta y blindada hace y deshace a su antojo. No jodas, y no hay que poner ejemplos porque aquí los actos bien hechos y moralmente aceptables se han convertido en la excepción y no en la regla como debería de ser.
El hombre debe ser agradecido por cualquier bien o favor recibidos, pero ese agradecimiento jamás puede llegar a la sumisión, a la vergüenza de no cumplir con los deberes que impone el puesto. Eso significa perder su dignidad y convertirse en un paria y no hablamos solo de la justicia, no señor.
Lo que si sé es que la sumisión no es la repuesta a esta crisis, no es el conformismo y mucho menos el miedo. Las putas de la Feria contaminaron todo y hasta el basural del antiguo edificio de Agricultura ardió para curar las hediondez que allí había, el descredito y el cualquerismo que ahora reina por esos lugares, ha hecho incinerarse en esta ocasión, hasta la vergüenza. ¿Apelar? Pero ante quien si todo es lo mismo. ¡No j….s! ¡Si señor!