La adolescencia es un periodo de cambios físicos, psicológicos, sociales, intelectuales, que va desde los 10 años y 11 meses hasta los 19 año, en los que encontramos algunas características específicas en cada etapa de las 3 que la componen (temprana, mediana y tardía).
En lo que respecta a la sexualidad, los adolescentes tienen por las etapas, y personalmente, conceptos y conductas diferentes.
Mas lo que todos deben tener es la misma información relativa a las responsabilidades de iniciar una vida sexual activa (que puede concluir en un embarazo) y el conocimiento sobre las ITS (infecciones de transmisión sexual).
Es responsabilidad de los padres, tutores, escuelas y colegios informar sobre estos tópicos, ya que en encuestas realizadas se ha encontrado que los adolescentes consideran que una vida sexual activa solo incluye coito como práctica, considerando que las relaciones orogenitales, los roces de genitales no son actividades sexuales ni practicándolos asumen riesgo alguno.
Siendo esto gran error.
Algunos adolescentes, debido a la falta de apoyo o de comunicación con los familiares, ya sea por desconocimiento de información adecuada que no puedan transmitirlas, manejos inadecuados de los límites y otras situaciones, desarrollan conductas de riesgo en el manejo de su sexualidad y de su intimidad sexual, siendo que no utilizan preservativos, no van a los chequeos médicos periódicos, exponiéndose a problemas prevenibles.
Sugerencias para los padres: de no querer encarar estas conversaciones con sus hijos, avergonzarse o no poder, busque un profesional que le pueda apoyar. No se arrepentirá.