Vista parcial de lo que es hoy el río Nizao.
Santo Domingo.-La presente sequía tiene ‘agarradas por el cuello’ a las autoridades agropecuarias del país, y lo grave del asunto es que no saben cómo enfrentar esta situación.
Aparentemente, en lo inmediato, parece que las autoridades del sector no tienen una solución a manos para presentársela al presidente Danilo Medina Sánchez, ni siquiera para mitigar el problema, mientras que por la falta de agua el área agropecuaria en sentido general ha sufrido pérdidas millonarias hasta ahora incalculables.
De mantenerse la falta de lluvia a nivel nacional, sobre todo en las diferentes zonas montañosas del país y en las cuencas donde nacen ríos, arroyos y cañadas que abastecen de agua los embalses de las presas, la situación se tornará más calamitosa, y de consecuencias imprevisibles para el agro dominicano.
La esperanza de que llueva está cifrada en el presente mes o en octubre, y de no registrarse precipitaciones importantes se teme lo peor, porque ya vendría la estación de otoño, en la que las lluvias prácticamente desaparecen por la cercanía de la época invernal y porque la sequía será más cruda.
De suceder así, lamentablemente, la actual sequía, que ya ha ocasionado grandes pérdidas a la agricultura y la agropecuaria se extenderá por más tiempo, por lo que la falta de agua para regadío seguirá causando estragos a los agricultores, que ven impotentes sus plantaciones aniquilarse, y decenas de empresas procesadoras de frutos se verán en la obligación de despedir parte del personal por la baja producción.
Los responsables
Además de ser atribuida al cambio climático y a los depredadores de los recursos naturales que han destruido y agotado los cauces de las fuentes acuíferas extrayendo todas clases de materiales para la construcción y a los destructores de nuestros bosques, también tienen su cuota de responsabilidad los funcionarios del sector agropecuario que ha tenido el país en los últimos 50 años, incluyendo los actuales.
Esto así, porque muy bien saben esos incumbentes que el problema de la sequía en el país es cíclica y no han tenido la vocación ni la capacidad para resolverlo y data de decenas de años.
Si los anteriores funcionario, como los actuales del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi), del Ministerio de Agricultura, del Instituto Agrario Dominicano (IAD), del Banco Agrícola y otras dependencias afines, hubiesen tomado las medidas y correctivos de lugar, hoy, en vez de la sequía tenerlos “agarrados por el cuello”, ellos y los agricultores se estuvieran riendo con la última “muela de atrás”, pero por la falta de agua ha sucedido todo lo contrario.
El Indrhi
Pero el más responsable de todos los organismos es el Indrhi, creado en la tiranía trujillista con el propósito de proveer del líquido, a través de canales y pozos tubulares, a los hombres del campo para que tuvieran agua suficiente para irrigar sus predios sembrados de frutos diversos.
Este organismo nunca ha cumplido a cabalidad con sus funciones y una muestra es que el 85 por ciento de los parceleros de los diferentes proyectos agrícolas del país no tienen pozos tubulares para extraer agua e irrigar sus cultivos y por eso la sequía les ha diezmado sus plantaciones.
Incluso, en varios gobiernos que ha tenido el país los funcionarios de turno, tanto del Banco Agrícola como del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, han firmado acuerdos para la construcción de los llamados pozos tubulares financiados, pero a los parceleros no les han hecho uno, ni regalado ni financiado.
Ahora, la verdad hay que decirla, sí han hecho decenas de pozos tubulares a políticos, funcionarios del Gobierno y ricos hacendados.
Los abrevaderos
Así mismo pasó con la construcción de los reservorios de agua (abrevaderos) para el ganado en la Línea Noroeste, donde se construyeron algunos, pero por la falta de mantenimiento se deterioraron y hoy, con la actual sequía que abate el país, tanto los ganaderos de la Línea Noroeste como los del Sur Profundo ven sus reses y otros animales morir de sed por la falta de agua.
Si a esos abrevaderos se les hubiese dado el mantenimiento adecuado la situación del ganado y de otros animales en esas regiones del país fuera otra.
Y hoy los funcionarios agropecuarios, por la negligencia y la dejadez mostradas no saben qué hacer para resolver el problema de la sequía que abate el país.
El Indrhi y su excusa “piadosa”
Siempre las autoridades de turno del Indrhi tienen una excusa para no construir los pozos tubulares y negarles los equipos a los agricultores y parceleros del país que les solicitan los aparatos.
Cuando algún parcelero se dirige al Indrhi a solicitar la construcción de un pozo tubular para tener agua para irrigar sus cultivos, por lo regular le dicen que los camiones perforadores están dañados o están trabajando en determinada región del país.
Que se sepa, el 85 por ciento de los agricultores y parceleros del país no tienen pozos tubulares para obtener el agua suficiente para regar sus cultivos. Pero sí los construyen a hacendados, políticos y funcionarios.
