Al gel o cristal de la sábila se le atribuye además la cura la insuficiencia renal, y oxigena la sangre.
Santo Domingo.-En base a sus múltiples usos, comprobados, especialmente en lo medicinal, estético y por las cualidades que se le atribuyen, la sábila (Aloe vera) bien podría catalogarse como una planta “mágica” originaria del Mediterráneo que se ha naturalizado en el mundo.
De su región natal fue expandida a Europa e introducida a América Central y las Antillas con los viajes de Cristóbal Colón, y así sucesivamente logró ser aceptada en muchas otras culturas que, incluso, la han industrializado.
Estados Unidos figura entre los países de mayor producción. En el caso particular de República Dominicana se exportan anualmente 360 mil plantas vivas hacia Florida, EE. UU., Holanda y Dinamarca, las cuales se cultivan especialmente en Baní, Barahona y Pedernales. También las adquieren laboratorios criollos.
“Es cultivada desde tiempos antiguos; los egipcios la usaban, y la Biblia refiere, incluso, que cuando Jesús murió se usó sábila mezclada con yerbas aromáticas para preparar el cadáver, que era la costumbre en Medio Oriente, Israel y Asia Menor”, explicó José Rafael Guzmán Rodríguez, encargado de la División de Permisos de Exportación e Importación de la Dirección de Biodiversidad.
Características-usos
De acuerdo con el profesional graduado en Ciencias Agrícolas y biólogo, esta planta es de hoja carnosa y en su interior posee un gel o cristal que actúa como cicatrizante de quemaduras y regenerador de tejidos por heridas, incluso sin procesar, como además para eliminar estrías.
Posee 12 vitaminas, 20 minerales y 18 aminoácidos, polisacáridos, propiedades medicinales y químicas, que son empleadas por la industria de fármacos y de cosmeatría.
“A nivel popular, su cristal mezclado con miel se usa como anticatarral y problemas respiratorios”, precisó Guzmán. Entre otra amplia gama de usos, dijo se le atribuye la cura de problemas disgestivos, en manchas de la cara y funge como purgante intestinal, también como protector solar y para fortalecer el cuero cabelludo y embellecerlo.
“A nivel mundial se están elaborando cremas hidratantes; los campesinos, especialmente los haitianos, la colocan en el dintel trasero de las puertas para la buena suerte y dizque para alejar los ‘malos espíritus’, y esas son costumbres mágico religiosas”, detalló Guzmán.
Prevé cáncer
“Es un antióxidante natural, porque ayuda a mantener el equilibrio celular tomada en jugos, lo que ayuda a reducir el riesgo de padecer cáncer de colon y previene las úlceras bucales y el hígado”, puntualizó Guzmán.
Apoyado en el diccionario botánico de nombres vulgares de la Española, del Alain Henri Liogier, el profesional dijo que existen otras variedades que también se comercializan, como las “Aloe Tiki tahi”; “Anistata; Juvenna y Cha-cha”.
La Aloe vera figura en Apéndices II de Convención Internacional de Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Flora y Fauna Silvestre (CITES).
Esa categoría equivale a que esta no corre peligro de amenaza y se permite su comercio. Guzmán define la sábila como una planta “milagrosa”.
Taínos daban uso medicinal
En el país, en las cuevas Hoyo de Sanabe, en la provincia Sánchez Ramírez, hay evidencias de que los taínos utilizaban la sábila en gran escala.
“Encontramos pictografías que representan una especie de proceso de la utilización de la planta mediante un cibucán”, reveló el arqueólogo espeologo Domingo Collado.
Como técnico del Viceministerio de Áreas Protegidas da cuenta de que en esas cuevas los indígenas aparecen con el cibucán (artefacto de guano, similar al colador) con el que machacaban o maceraban la hoja para extraerle el cristal para su uso medicinal.