El escritor y crítico alemán Gotthold Ephraim Lessing dijo que “la risa nos mantiene más razonables que el enojo”. El enojo nos aleja de la alegría, un sentimiento que siempre habrá de procurarse en virtud de que aproxima a las personas a la felicidad.
El primer paso, a través de la sonrisa, debe comenzar con nosotros mismos, ya que no todos los demás están dispuestos a sonreírnos.