SANTO DOMINGO.-Propietarios y clientes de negocios donde se comercializa la “hookah” manifestaron ayer que la promulgación de la Ley 16-19 sobre la prohibición del uso de esta en lugares públicos y privados abre las puertas al contrabando del instrumento.
El empresario Juan Mejía expresó que la prohibición provocará que la venta sea clandestina y que se creen entidades policiales para vigilar los lugares.
En tanto Dismaris Gómez, propietaria de una tienda de decoración de fiestas, expresó que en el país existen asuntos de mayor importancia que prohibir la “hookah”, además de que hay jóvenes que sustentan su familia con ese negocio.
“Hay prioridades en este país que no es la ‘hookah’, aquí hay mucha delincuencia y ellos (el Gobierno) están en la ‘hookah’.
La gente fuma y nadie le pone una pistola en la cabeza para hacerlo, toman alcohol y nadie te pone una pistola.
El alcohol es peor que la ‘hooka’, ya que nadie mata por los efectos de la esta”, dijo la decoradora. La “hookah” no solo llegó a los centros nocturnos, sino también a barberías, ya que en estos lugares se consumen las pipas.
Una muestra de ello es que en la barbería Imperio, la cual funciona como bar, ubicada en el ensanche Luperón, su propietario tuvo que eliminar su comercialización por las quejas de los clientes.
Sandi Suriel, dueño del lugar, explicó que durante ocho meses que se estuvo vendiendo el servicio de “hookah” los jóvenes asistían al lugar para tomar alcohol y fumar la pipa.
Charles Melenciano, propietario de Sweet Ju-k, dijo que la prohibición afectará a las discotecas a tal punto que tendrán que cerrar.
Casa Abierta
— Director
Juan Raddamés de la Rosa manifestó que la ley apuesta a un nuevo modelo prohibicionista y represivo, que contribuirá a incrementar el problema de las drogas e impulsar la ilegalidad. Así como violar los derechos de las personas.