Bloomberg News.-El riesgo de un impasse político pende sobre los bonos españoles en momentos en que los principales partidos no logran establecer una clara ventaja en las encuestas con miras a las elecciones de este año.
Los inversores pueden exigir una prima adicional de 20 puntos básicos por tener bonos españoles a 10 años en los próximos meses debido a la amenaza de un resultado no concluyente, según la mediana de las estimaciones de siete economistas que consultó Bloomberg News.
Si bien la posibilidad del establecimiento de un gobierno opuesto a la austeridad, al estilo griego, se reduce, los inversores analizan si las próximas autoridades podrán continuar con la tarea de restaurar la economía luego de la votación de diciembre.
Las encuestas sugieren que ningún partido obtendrá mayoría, y no parecen surgir coaliciones naturales.
“El mayor riesgo para España es el de un estancamiento político”, dijo Raj Badiani, un economista de IHS Global Insight en Londres.
“El impulso de la reforma que ha contribuido a la recuperación del país podría perderse si las elecciones arrojan un resultado diverso”.
Algunas firmas administradoras de dinero ya se desplazan a Italia a los efectos de evitar ese riesgo, por más que la economía española crece cuatro veces más rápido.
La diferencia, o diferencial, entre los rendimientos españoles a 10 años y los bonos italianos de similar vencimiento tocó los 20 puntos básicos la semana pasada, la mayor cantidad en dos años.
Alivios impositivos
El primer ministro Mariano Rajoy reduce impuestos en un intento de convencer a los españoles de que es él quien mejor posicionado está para cuidar sus bolsillos en momentos en que el desempleo declina respecto de un récord de 26 por ciento de 2013.
Sin embargo, como el 23 por ciento de los trabajadores continúa sin empleo, esos alivios podrían no bastar para asegurarle una clara victoria.
Rajoy, que tiene 60 años, obtuvo el 45 por ciento de los votos en 2011, lo cual le aseguró una mayoría récord que le permitió a su gobierno impulsar reformas impopulares sin oposición en el parlamento.
Tres encuestas publicadas entre julio y agosto indicaron que el Partido Popular de Rajoy tiene una pequeña ventaja sobre los socialistas, el principal partido opositor, pero está muy lejos de tener una mayoría.
La encuestadora estatal CIS pronosticó este mes que el PP conseguiría el 28 por ciento de los votos y que los socialistas obtendrían un 25 por ciento.
El partido Podemos, que se opone a la austeridad, contaría con el 16 por ciento, mientras que a Ciudadanos, un partido favorable al mercado que rivaliza con el PP, se quedaría con un 11 por ciento.
Los inversores ya han empezado a incorporar la turbulencia política anterior a la votación nacional con motive de las elecciones regionales que se celebrarán el 27 de septiembre en Cataluña, donde los separatistas buscan un mandato para declarar la independencia de España.
El diferencial entre la deuda española a 10 años y la de Alemania alcanzó la semana pasada los 143 puntos básicos, la mayor cantidad en seis semanas.