Siendo adolescente y regresando de Bocas de Licey del Municipio Tamboril al barrio María Auxiliadora a la parroquia del mismo nombre, escuche en los avisos parroquiales la integración de jóvenes al grupo Juventud Franciscana (Jufra) por la coordinadora del Consejo Pastoral, señora María Idalia de Jesús.

Sus hermosas palabras de motivación y en busca de un espacio de acogida, abrazo, de amor, perdón y de unión; sentí en lo más profundo de mi corazón integrarme a esa entidad religiosa.

Lo que me permitió conocer a San Francisco de Asís, su estilo de vida, solidaridad, paz y entrega a los más sencillos y humildes. Sentí la puerta del cielo azul y de esperanza de lluvias, un regocijo en mi corazón. Eso deseo para mis lectores de Conflictos y Mediaciones en esta semana.

En Conflictos y Mediación de mayo, mes de las madres y de sus hijos e hijas, comparto la hermosa oración de un ser extraordinario tanto para la Iglesia como para el mundo en busca de la paz en medio de eternos conflictos bélicos y la inversión de miles de millones de dólares en armamentismo. Además, por el continuo conflicto entre Palestinos e Israelíes.

Sin tomar en cuenta que más de mil millones de personas se acuestan sin comer y poder consumir el más apreciado líquido del mundo: el agua. Que San Francisco de Asís ilumine a los ricos y gobernantes de los países desarrollados a visualizar a un mundo más humano y solidario.

De menos guerra y de mayor solidaridad a los más necesitados.

Oración por la paz

Señor, haz de mí un instrumento de tu paz.
Que allá donde hay odio, yo ponga el amor.
Que allá donde hay ofensa, yo ponga el perdón.
Que allá donde hay discordia, yo ponga la unión.
Que allá donde hay error, yo ponga la verdad.
Que allá donde hay duda, yo ponga la Fe.
Que allá donde desesperación, yo ponga la esperanza.
Que allá donde hay tinieblas, yo ponga la luz.
Que allá donde hay tristeza, yo ponga la alegría.

Oh Señor,
que yo no busque tanto ser consolado, cuanto consolar,
ser comprendido, cuanto comprender,
ser amado, cuanto amar.
Porque es dándose como se recibe,
es olvidándose de sí mismo como uno se encuentra a sí mismo,
es perdonando, como se es perdonado,
es muriendo como se resucita a la vida eterna.
Amén.

“La Oración por la paz es una oración tradicional que suele relacionarse con san Francisco de Asís. San Juan Pablo II la rezó frente a los representantes de las Iglesias cristianas y las religiones del mundo cuando se reunió con ellos para rezar por la paz en 1986”. https://www.loyolapress.com/catholic-resources/espanol/oracion/oraciones-de-los-santos/oracion-por-la-paz-san-francisco-de-asis/

“La paz les dejo, la paz les doy” Jesús de Nazaret.