El presidente Danilo Medina tampoco se refirió a Cultura y Medio Ambiente, pero es Deportes el tema que más me atañe, razones obvias.
Había advertido, el mismo día del discurso, que el renglón deporte casi siempre estaba ausente de la agenda de los políticos, salvo a la hora de presentar ofertas electoreras u honrar un personaje deportivo. ¡Confirmado! Supe, oficiosamente, que el Ministerio de Deportes tramitó a tiempo sus memorias, pero en Palacio no le encontraron espacio (¿?).
Me llama la atención la pasividad del movimiento deportivo nacional, olímpico o no, que no reacciona ante nada.
La oposición política en materia deportiva no existe, haciendo honor a su superior jerárquico, “ni para allá voy a mirar”.
Las federaciones deportivas están mudas, no dicen nada, aparentemente atadas a las subvenciones mensuales que otorga el gobierno.
El COD también se calló, ¿o se cayó? Además de referirse al saneamiento de las instalaciones deportivas me luce que el Presidente pudo haber dicho, en menos de 15 segundos, “cumplimos con la delegación hacia Veracruz y nuestros atletas defendieron con honor los colores patrios”.