Edilí Arias 
La “depresión blanca” o “blues de Navidad” es un estado de ánimo temporal negativo hacia todo lo relacionado con esta temporada.
Santo Domingo.- La Navidad es una de las épocas más esperadas por muchas personas, una temporada en la que “la felicidad se siente en el aire”. Sin embargo, a pesar de ser un período de alegría, una parte de la población experimenta lo que se conoce como «depresión blanca» o «Blues de Navidad».
Este trastorno desencadena sentimientos de tristeza, soledad y estrés durante las festividades.
La condición puede variar de persona a persona, por lo que es fundamental conocer cómo tratarla adecuadamente.
“Cuando las personas reflexionan sobre el año que está por terminar y evalúan si sus metas se cumplieron, la pérdida de seres queridos, de trabajo o pareja, la soledad y la situación financiera pueden acelerar la aparición de esta condición”, explicó a El Día la psicóloga y terapeuta familiar Yesmin Meyer.
Otro factor a destacar son aquellas personas que se encuentran solas, ya sea por razones de trabajo, estudios o porque residen en otro país.
“Las personas experimentan la soledad en esta fecha de manera más significativa”, resaltó la terapeuta.
La psicóloga y terapeuta familiar Yesmin Meyer.
Tristeza versus depresión
La experta destacó que es crucial poder diferenciar entre sentirse triste y estar deprimido para brindar el apoyo adecuado.
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Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el trastorno depresivo (o depresión) es una afección mental común que implica un estado de ánimo deprimido o la pérdida del interés o placer por actividades durante largos períodos de tiempo.
“Cuando hablamos de depresión, nos referimos a una patología que tiene una serie de síntomas. Es necesario identificar si estamos viviendo un proceso de duelo o si estamos experimentando una depresión clínica”, expresó Meyer.
La psicóloga agregó que es importante que las personas traten de adaptarse a los cambios emocionales, y recordó que «la primera Navidad tras una pérdida es la más difícil».
El estrés de las fiestas
Las personas con tendencia al perfeccionismo, que tienden a implicarse en exceso o a querer agradar a los demás a toda costa, con una gran autoexigencia, son las que tienen mayor riesgo de sufrir estrés durante la temporada navideña.
Meyer destacó que, generalmente, son las mujeres quienes padecen más de este estrés, ya que en muchos casos asumen la responsabilidad de coordinar las actividades familiares y sociales.
“Hay que disfrutar de la fiesta, aunque estemos casadas o pasando por situaciones difíciles”, añadió la experta.
Qué hacer
Si te sientes solo o aislado, la psicóloga recomienda buscar eventos comunitarios o religiosos, o unirte a grupos sociales que te permitan conectarte con los demás.
Gestionar nuestros pensamientos: Es importante enfocarnos en los aspectos positivos de esta época navideña, en lugar de centrarnos en lo negativo.
Perdonar: En ocasiones, las emociones negativas de fechas pasadas nos afectan emocionalmente.
Liberarnos de esas cargas emocionales puede mejorar nuestra salud mental. Acercarse a la persona con la que tuvimos un conflicto y hablar de manera tranquila puede ser un paso hacia la sanación.
Realizar actividades placenteras: Hablar con amigos, dar un paseo o incluso disfrutar de un baño tranquilo puede ayudarnos a relajarnos y tener una mejor perspectiva de las cosas.
“A veces, por las prisas del día a día, olvidamos lo importante de tomarnos un tiempo para nosotros mismos”, concluyó Meyer.
