Santo Domingo.-Un cuadrilátero, música de fondo, público emocionado, personajes carismáticos y hasta tenebrosos, todos estos elementos nos llevan a una sola conclusión: ¡Lucha libre!.
La lucha libre comenzó a practicarse en el país desde los años 50,y en ese mismo año se realizaron las primeras promociones para este tipo de evento. El escenario era el Teatro Atenas, que estaba ubicado en la calle Ravelo casi esquina Juan Pablo Duarte, en la Capital.
En el año 1960 el señor José A. Brea Peña congregó a un grupo de luchadores en el Coliseo San Rafael, y desde allí brilla la primera época de este deporte que posteriormente se convertiría en uno de los más vistos y aplaudidos de la República Dominicana.
Después de varias décadas de esplendor, la lucha entró en decadencia, hasta que prácticamente desapareció.
Resurge la lucha Con la DWE:
En los últimos tiempos, la lucha libre ha cobrado vida nuevamente en nuestro país, gracias al empeño y surgimiento de la empresa Dominican Wrestling Entertainment, fundada en el año 2008 por el señor Gorge Maldonado quien también es luchador y se apoda ¨Rico Casanova¨, conformando así la única empresa legalmente constituida de lucha libre en la República Dominicana.
La DWE realiza sus prácticas los miércoles y viernes en el Coliseo Teo Cruz en el techado de boxeo, y la mayoría de los atletas oscilan entre los 18 y 40 años.
Esta agrupación deportiva realiza eventos mensualmente en diferentes lugares de la capital y en algunos pueblos, contando con el apoyo de una fanaticada que cada día va en aumento por la calidad que demuestran los luchadores dentro del ring en cada uno de sus combates.
Esta empresa también ha traído e incluido en sus actividades luchadores panameños, boricuas y japoneses ofreciendo así una cartelera diversa y llamativa para el publico dominicano.
Talentos destacados:
Carlos José Gonzales mejor conocido dentro de este ambiente de lucha libre como «Don Mario Kilates» ,se ha convertido según sus compañeros en el «Mejor de los mejores» por ser el manejador más destacado que tiene la DWE, guía y pieza clave en la creación de todos los eventos que realiza esta empresa.
Futuros eventos:
Dentro de las actividades que próximamente se realizarán está la del sábado 3 de agosto y la que aprovecharán para hacer la presentación de nuevos luchadores como ¨ Yankee¨ y ¨Mutante¨.
Otra de las actividades que pronto se realizarán será ¨La Venganza¨ en donde ¨Don Mario Kilates¨ promete un magnífico evento a todos los fanáticos de la lucha libre. Dentro de los luchadores que participarán están: ¨El internacional asesino Je¨, ¨El tenerse y su discípulo¨, ¨El Supremo¨, ¨Leviathan¨,¨Makiavelo¨, ¨El fenómeno tormenta» y otros.
La DWE unido con sus atletas se esfuerza cada día para ofrecerle al público en esos eventos y en los futuros, un espectáculo inigualable e inolvidable con todo el talento y carisma de cada uno de sus participantes.
Un poco de historia… cuando comenzó a brillar:
La época más importante y eufórica para la lucha libre dominicana como deporte, fue a finales del 1970 y a principios de 1980 debido a que la empresa llamada ¨Dominicana Espectáculo¨ se encargó de comercializarlo y hasta transmitirlo en vivo, vía TV y Radio logrando de esta forma impulsarlo como deporte y convertirlo en un espectáculo de masas.
Contando con las participación de Jack veneno, ¨El campeón de la bolita del mundo¨, y otras estrellas como Vampiro Cao, Los Hermanos Broncos, Relámpago Hernández y Astromán lograron con su participación, que este deporte evolucionara conquistaron el corazón de miles de dominicanos.
En cada encuentro, estos luchadores con sus entradas espectaculares, hazañas, vestimenta, máscaras, profesionalismo y generosas reparticiones de salami de mallita, un popular estimulante para el apetito y otros productos que motivaban al público presente y televidente, a participar del show.
Época Difícil:
En los años 90 y a principios del 2000 la lucha libre decayó por diferentes factores como fueron: el desinterés de la población y de los inversionistas, agregándole a esto la falta de nuevos talentos e inversión en los espectáculos contribuyendo de esta forma a su notable deterioro.
