No sé de quién es la frase, pero al primero que se la oí fue a Carlos Nina Gómez: “La ingratitud no tiene memoria”… Y es así… Por eso, no sé qué “secretos” hay, pero vimos con asombro como Audo Vicente era despedido luego de darles a equipos algo tan difícil como coronas… Por esa ingratitud también vemos como a la leyenda del fútbol Quisque Mendoza su federación lo tiene prácticamente en la indigencia, mientras sus compañeros del ejecutivo “patean el filete”…
Y hay que llegar a Juanchy Sánchez, quien enfrentó sectores poderosos para llevar al doctor Valdez a la presidencia de las AC y desde que llega le quita la comercialización.. No es que no se la quite, es que por lo menos le permita concursar… También, todos conocen el caso de un periodista que después de años y años de lealtad, la otra parte cambió de status$$$, lo despiden y para que le paguen 10 mil 800 dólares de prestaciones que le tocaban hubo que ir
a la justicia…
Y se le quedaron con mil 800, solo le pagaron 9 mil… ¿Creen que Dios no reclamará ese abuso contra uno de sus siervos?… Pero hay más, ya que llegamos a Bartolo Colón, quien prácticamente estaba retirado cuando dos médicos le reviven la carrera y por eso ha ganado muchos millones, pero ni las gracias les ha dado… ¿Será que se creen eternos, será que subestiman tanto a Dios que no saben que apunta todas esas iniquidades en el Libro de la Vida y que las castiga fuerte?.. Tiene razón mi amigo Nina Gómez, “la ingratitud no tiene memoria”.