La inflación en el Reino Unido se mantuvo a 2,3 por ciento en marzo en tanto los pasajes de avión están más baratos que el año pasado debido a la altura del año en la que cayó el feriado de Pascua.
El alza de los precios viene presionando a los minoristas: en el primer trimestre, las ventas presentaron la mayor caída desde 2011.
Los operadores de supermercados se pusieron creativos a la hora de transferir los aumentos de precios a los clientes.
Productos básicos como la leche quedaron intocados debido a la fuerte competencia, pero los precios de artículos comprados con menos frecuencia —como las bombillas— subieron un 19 por ciento desde octubre.