El papa Francisco, de origen argentino, dijo que “el faraonismo es la tentación de sentirse por encima de los demás y de someterlos por vanagloria, de tener la presunción, de dejarse servir en lugar de servir”.
La igualdad es un constructo simbólico del lenguaje que siempre se promueve como un derecho inherente a todos los seres humanos, pero que en la práctica solo constituye una ilusión porque aparecen los “faraones” que se consideran una especie de dioses del Olimpo.