El proceso de la cadena de frío busca extender la vida del producto y evitar la formación de microorganismos . Foto Elieser Tapia.
Santo Domingo.-El crecimiento económico que experimenta República Dominicana ha traído consigo una transformación en el consumo de los residentes en el país, en el que se evidencia un incremento de la demanda de productos perecederos y refrigerados.
Dicho auge está relacionado con diversos factores económicos y sociales, los cuales han llevado a los empresarios locales a innovar y utilizar la cadena de frío en la logística de suministros y distribución de alimentos, convirtiéndola en un motor para el desarrollo económico.
El uso de esa herramienta no es nada nuevo para algunas empresas vinculadas en suministro de alimentos como supermercados, centros de acopio de leche, mientras que para otras como procesadoras de carnes, mercados públicos, colmados y puntos de venta de comida rápida existen oportunidades de mejoras.
De acuerdo a José Aracena, experto en medidas sanitarias y fitosanitarias, en el sector empresarial se han invertido en almacenes fríos, transporte y en el proceso de empaque.
No obstante, entiende que hay desafíos que superar, entre los que se destacan la falta de capacitación del personal de los supermercados, los cuales asegura en algunos casos colocan a temperatura inadecuada productos perecederos de producción local, lo que tiene un costo para los productores.
“Es normal encontrar en un supermercado lechosa, piñas, aguacates y brócolis con lados dañados por exceso de frío o golpes”, destacó el también responsable en el país del Proyecto TraSa, programa de alimentos para el progreso del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos.
El experto en logísticas precisa que muchas empresas ponen los productos en frío, pero no en la temperatura adecuada pese a que existen normas.
Sin embargo, los productos importados reciben mejor trato o temperatura. Otra limitante que tienen las empresas locales y comerciantes del día a día son el alto costo de la energía y el deficiente servicio de la misma, dijo el ejecutivo.
Apuntó que en ese caso lo más factible es que las entidades vinculadas a la supervisión fortalezcan las acciones para mejorar la calidad de lo que se consume en el mercado local. Destacó que la clave está en concientizar a los actores vinculados al suministro de alimento de como mantener la inocuidad.
El experto explicó que para mantener la inocuidad y extender la vida de los frutos se les debe orientar a los productores que cuando cosechen traten de enfriarlo lo más pronto posible y en el caso de no contar con almacenes fríos poner los productos en la sombra, no ponerlos en el suelo, que se coloquen en tarimas o lonas y que para transportar los productos se haga en vehículos mucho más limpios.
“Que no se use la camioneta que transporta el estiércol de abono o pollos o animales porque puede contaminar las frutas o vegetales que se están cosechando”, advirtió.
El ejecutivo aprovechó para señalar que desde Trasa han capacitado más de mil productores sobre buenas prácticas agrícolas que incluyen como tomar medidas preventivas para evitar que el alimento que se cosecha esté contaminado.
Miguel Ángel Lajara y José López de la Asociación Dominicana de Avicultura explicaron que usan la cadena de frío para almacenar los productos que no tienen salida diaria en la actualidad.
Lo que hacen es rentar espacio en empresas que se dedican a la renta de almacenes de frío para productos perecederos. Pero a futuro tienen un proyecto de pignoración de la producción de pollos y huevos.
Con este proyecto los productores pretenden garantizar el suministro de esa proteína y la monetización a través de la banca nacional. Su plan es mantener unos inventarios de pollos refrigerados, con una inversión aproximada 400 millones de pesos, lo que permitirá monetizar al productor de inventario congelado.
Responsables
— Regulación
La inspección y creación de las normas y reglamentos reposa sobre al menos 10 instituciones según el Decreto 346-19, donde señalan a DIGEMAPS, Agricultura, Proconsumidor, DNCD, Apordom, Intrant y Cesfront.
El país tiene 128 centros de acopio
Datos. El Banco Central cita datos de la DIGEGA en los que precisa que el país tiene 128 centros de acopio a nivel nacional, de los cuales 94 (73.4 % del total nacional) estaban localizados en 12 de las 14 provincias de la región norte.
Sólo en las demarcaciones de la línea noroeste se encontraban 59 centros, de los cuales 20 se ubican en Santiago Rodríguez, 19 en MonteCristi y 16 en Dajabón. También, la Asociación de Productores e Invernaderos de Ocoa con asistencia del Gobierno instaló una planta empacadora de vegetales con una inversión millonaria.
Fernando Durán, administrador del Banco Agrícola, destacó la importancia de la electrificación en el proceso de la cadena de frío.
Por D. Acosta/D. Bonilla