La escoba

La escoba

La escoba

Elías Brache

Una de las acciones más trascendentales de la presente gestión de gobierno ha sido la de depurar la nómina pública.

Cuando me refiero a depurar, no lo hago en el sentido práctico político de colocar los adeptos en funciones que ocupaban otras personas, sino en procurar que todo aquel que recibe un beneficio del estado pueda justificar el mismo.

La práctica de inflar las nóminas colocando personal que no es necesario, o que realmente solo sirven de “presta nombres” a los fines de repartir el sueldo devengado, no es nueva y precisamente por ello ha requerido decisión enfrentar esta acción corrupta.

Incluso en los casos ventilados por sometimiento de la Procuraduría General de la República, han salido a relucir variaciones más graves de esta forma de corrupción. Un ejemplo son las llamadas nominillas, que poseen la diferencia con las nóminas de que generalmente esquivan el cedazo de mecanismos de control y fiscalización.

Esta labor de limpieza que no deja huellas visibles, como dejarían una carretera o un parque, no es menos importante pues restaura la noción de que para producir dinero se debe trabajar. Noción que perdió gran parte de relevancia en los gobiernos del Partido de la Liberación Dominicana.

Existe un verdadero sacrificio en emprender esa tarea, pues organizar las finanzas públicas implica privar de beneficios a gente que se acostumbró a esas anomalías, y ojo, gente de todos los partidos y de todos los estratos sociales.

Eso, lógicamente, convierte a quien toma la decisión de hacer las cosas correctamente en un odioso, pero esa es la labor de un funcionario público, velar por el interés general y no el personal.

Siempre habrá quejas y descontentos por cancelaciones en el sector público, y sí, siempre habrá algunas injustas pues todos nos equivocamos. Pero con solo un vistazo a los reportes de prensa, es evidente que el desorden era mayúsculo y que quienes se beneficiaban no deben seguir haciéndolo.

Ha de esperarse que la labor de ajustar las nóminas públicas siga su curso, y que de  ser comprobadas las infracciones, los responsables enfrenten el peso de la justicia por sus acciones.

Enfrentando la corrupción, y en cumplimiento de las legislaciones laborales y los lineamientos de administración pública, hay que seguir adelante. Que no se detenga la escoba.



Elías Brache

Licenciado en Derecho Cum Laude (UNPHU) con estudios de Especialidad en Gobierno y Politicas Publicas (FLACSO) ha ocupado diferentes posiciones dirigenciales en su vida privada y publica incluyendo las de Vice Canciller de la Republica y Gerente del Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (INDOTEL).