Chicago (EE.UU..- La dupla estelar compuesta por James Harden y Joel Embiid disparó el entusiasmo de los fanáticos de los 76ers de Philadelphia con un tremendo arranque este fin de semana, 127 puntos en los dos triunfos logrados en las visitas a los Minnesota Timberwolves (133-102) y a los New York Knicks (125-109).

Tras ser protagonista de la operación más destacada del último día del mercado de traspasos, Harden ultimó su recuperación de unas molestias en los isquiotibiales y debutó como jugador de los 76ers con dos actuaciones sobresalientes y una afinidad excelente con su compañero Joel Embiid, con el que apunta al anillo.

El MVP de la temporada regular de 2018 no tardó en tomar las riendas de los 76ers, al complementarse de forma hasta este momento impecable con Embiid, el mejor pívot de la NBA y sólido candidato al MVP de la presente campaña.

En su primera aparición juntos en cancha, en la visita del pasado viernes a los Timberwolves, Harden anotó 27 puntos, repartió 12 asistencias y capturó 9 rebotes, mientras que Embiid selló un doble doble de 34 puntos y 10 rebotes.

Los 76ers triunfaron sin apuros como visitantes con 133 puntos en su haber y un margen de 31 puntos sobre sus rivales. Aún más brillante fue la exhibición de este domingo, en un escenario legendario como el Madison Square Garden de Nueva York, cuando Harden firmó un triple doble de 29 puntos, 16 asistencias y 10 rebotes. También su compañero Embiid rozó el triple doble, al acabar con 37 puntos, 9 rebotes y 9 asistencias.

Los 76ers asaltaron el Madison Square Garden con contundencia y triunfaron 125-109 para mantenerse terceros en el Este (37-23), detrás de los Bulls (39-22) y de los Miami Heat (40-21). Y por si fuera poco, en sus dos primeros partidos juntos, Harden y Embiid, dos auténticos especialistas en cargar de faltas a sus rivales, lanzaron un total de 59 tiros libres. Harden acumuló 19 en dos encuentros, mientras que Embiid lució números espectaculares, con 13 en Minnesota y hasta 27 contra los Knicks.

Es un elemento de gran peso para el equipo de Doc Rivers, que cuenta con dos estrellas completas y que saben sacar máximo provecho de las faltas que reciben. Harden metió 8 de 9 en Minnesota y 10 de 10 en Nueva York; Embiid anotó 11 de 13 y 23 de 27 en Nueva York. Ambos se han mostrado además muy unidos tanto en la cancha como fuera de ella, intercambiando bromas y risas.

Una relación fluida y un estado de ánimo positivo que ayuda a Harden a aumentar el nivel después de su deslucido paso por los Brooklyn Nets, en los que, por varias razones, el trío estelar con Kevin Durant y Kyrie Irving no funcionó. No le falta ambición a la “Barba”, que tras lucir registros anotadores impresionantes sin llegar a levantar el título, quiere coronar su carrera con el anillo.

“Desde el principio, en Houston, ‘Philly’ era mi primer opción, pero no se pudo hacer. Sabía desde hace tiempo que este era mi sitio ideal, con el mejor pívot de la liga, Joel, y Doc Rivers. Estoy feliz, honrado por estar aquí. Todos queremos ganar, estoy feliz por esta oportunidad”, afirmaba Harden en su rueda de prensa de presentación.

“Quiero centrarme en ganar partidos y ganar el campeonato”, añadía. El arranque de su etapa en Philadelphia, a la espera de que lleguen citas más exigentes, fue inmejorable.