Moscú.- El jefe de la Duma o cámara de diputados de Rusia, Viacheslav Volodin, aseguró hoy que “cualquier ataque” contra el presidente, Vladímir Putin, es considerado una “agresión” contra el país, en alusión a la orden de arresto dictada por la Corte Penal Internacional (CPI) por la deportación ilegal de niños de Ucrania, considerado un crimen de guerra.
“Cualquier ataque al presidente de la Federación Rusa lo interpretamos como una agresión contra nuestro país”, dijo Volodin en su cuenta de Telegram. Además, el jefe del Comité de Instrucción de Rusia, Alexandr Bastrikin, ordenó lanzar una investigación sobre lo que llamó “emisión ilegal por parte del Tribunal Penal Internacional de una orden de arresto contra un ciudadano ruso».
En el marco del proceso, Instrucción se propone establecer la identidad de los miembros del tribunales que adoptaron dicha decisión.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, tachó la orden de “indignante” e “inadmisible». “Rusia, como otros países, no reconoce la jurisdicción de ese tribunal, por lo que cualquier decisión de ese tipo es para Rusia insignificante desde el punto de vista del derecho”, dijo, según la agencia RIA Nóvosti.
La sala de cuestiones preliminares de la CPI también emitió una segunda orden de detención contra la política rusa María Lvova-Belova, comisionada presidencial para los Derechos del Niño en Rusia, con la misma acusación.
La CPI considera a Putin “presunto responsable” de la deportación ilegal de niños ucranianos, lo que ha sido denunciado en numerosas ocasiones por las autoridades de Kiev. Ambas órdenes de detención son las primeras de su tipo que emite la CPI en el contexto de su investigación de crímenes en la guerra en Ucrania.
Los delitos de los que se le acusa ocurrieron al menos desde el 24 de febrero de 2022 en el “territorio ocupado de Ucrania”, señaló la CPI, que considera que hay “motivos razonables” para creer que Putin tiene “responsabilidad penal individual” por el crimen de guerra que supone la deportación de menores.
Rusia no ha ratificado el Estatuto de Roma, el tratado fundacional de la CPI, por lo que no es miembro de este tribunal, como tampoco lo es Ucrania, pero Kiev sí ha autorizado a la Corte a investigar la comisión de crímenes de guerra durante la conocida como “operación militar especial” rusa en Ucrania.
Es la primera vez en la historia que la CPI dicta una orden de arresto contra el presidente de un país miembro del Consejo de Seguridad de la ONU.