No hay una forma 100 por ciento segura para que las autoridades sanitarias puedan evaluar si los pasajeros de una línea aérea padecen una enfermedad como el ébola, que permanece en estado latente y es indetectable durante días.

Si bien el sistema ampliado que se anunció para cinco aeropuertos de los Estados Unidos, entre ellos el John F. Kennedy de Nueva York, contribuirá a frenar la extensión de la enfermedad, constituye una defensa imperfecta ante una emergencia compleja de salud pública, dijo Lawrence Gostin, un profesor de legislación global de salud de la Universidad de Georgetown.

Por otra parte, hay muchos trucos, tal como tomar Tylenol antes de aterrizar les aseguran que podrán pasar por una prueba de fiebre al atravesar la Aduana, algo que los pasajeros ya han utilizado antes, como durante el brote de virus SARS de 2003.