Panamá (EFE).- La crisis poselectoral de Venezuela, con Nicolás Maduro declarado presidente reelecto sin que se conozcan las actas que lo sustentan y la oposición reclamando para sí un triunfo contundente, se cuela con discusiones informales en los actos por la juramentación de Luis Abinader como presidente reelegido de República Dominicana.
“Esa reunión se va a aprovechar, en pasillo -es la fiesta de mi amigo Luis Abinader- pero sí hablaremos de Venezuela, eso es inevitable. Ayer lo he confirmado y sí hablaremos”, afirmó este jueves el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, tras informar que viajará hoy al país caribeño.
Mulino, quien asumió el Gobierno el pasado 1 de julio para el quinquenio 2024-2029, es el impulsor de una propuesta inicial para celebrar una cumbre sobre la crisis venezolana, en busca de una solución que implique el reconocimiento del opositor Edmundo González como presidente electo de Venezuela y un proceso de transición política para que asuma el poder, como lo sostuvo este jueves el mandatario panameño.
A esta cita cumbre, propuesta en un principio para realizarse en Panamá, fueron convocados los 17 gobiernos que el pasado 31 de julio votaron en la Organización de Estados Americanos (OEA) a favor de una resolución que pedía a las autoridades venezolanas publicar “de inmediato” las actas de las elecciones del 28 de julio, iniciativa que finalmente no prosperó.
Los países que votaron a favor de la resolución fueron Argentina, Canadá, Chile, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Guyana, Haití, Jamaica, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Surinam y Uruguay.
Muchos de estos gobiernos coincidirán en la asunción de Abinader, por lo que Mulino planteó aprovechar la ocasión para hablar de Venezuela. El propio presidente Abinader dijo el lunes pasado que no descartaba que la crisis poselectoral venezolana fuera abordada “de manera informal” por algunos de los jefes de Estado o de Gobierno que acudan a su toma de posesión este viernes.
Iniciativas multilaterales Mulino dijo este jueves que tanto en la OEA como en las Naciones Unidas “hay iniciativas multilaterales para seguir ayudando a Venezuela en esto, dentro de la línea establecida de reconocimiento del triunfo de Edmundo González como presidente electo de Venezuela, entendiendo la posibilidad, que ojalá se así, de que se dé una transición política de cara a que el señor Edmundo llegue a ser presidente y Nicolás Maduro salga del poder de una forma inteligente y concertada».
“La negociación no es de Panamá, pero obviamente sí avalaríamos una negociación que no represente para Venezuela, y lo digo por experiencia en Panamá, un ‘madurismo’ sin Maduro”, alertó el mandatario panameño.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, sugirió este jueves dos posibles salidas a la crisis venezolana- la formación de un gobierno de coalición o la celebración de nuevas elecciones, durante una entrevista en la que reiteró la necesidad de que las autoridades venezolanas divulguen las actas de las elecciones.
Maduro “sabe que está debiendo una explicación a todo el mundo”, dijo Lula, y añadió que su Gobierno junto con los de México y Colombia trabajan para encontrar soluciones a la crisis poselectoral.
Tras las elecciones y la proclamación de Maduro por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE) se han registrado manifestaciones opositoras contra el “fraude” en las que han muerto más de dos decenas de personas, según ONG’s, mientra más de 2.000 han sido detenidas y hay denuncias de un recrudecimiento de la represión y violación a los derechos humanos por parte del Gobierno.
Las actas de votación
Con el conteo del 96,87 % de las actas transmitidas, según el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, Maduro fue reelegido con el 51,95 % de los votos, mientras que González Urrutia obtuvo el 43,18 % de los apoyos.
Sin embargo, la oposición mayoritaria, agrupada en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), publicó en una página web las actas de los testigos de votación en “más del 80 % de las mesas” que demuestran, según asegura, que su candidato ganó los comicios por amplio margen, un resultado reconocido por países como Argentina, Estados Unidos, Perú o la propia Panamá, entre otros.
El chavismo, que también tuvo testigos en las mesas pero no ha divulgado actas, desestima esos documentos presentados por la oposición y no los considera válidos. Un informe preliminar de un panel de expertos de la ONU concluyó que las presidenciales venezolanas carecieron de las “medidas básicas de transparencia e integridad que son esenciales para celebrar elecciones creíbles”, mientras que la oposición señaló que el documento refuerza la tesis que avala el triunfo de González.
Las autoridades venezolanas han desacreditado tanto el informe del panel de la ONU como los señalamientos del Centro Carter, que consideró que las elecciones no pueden ser consideradas democráticas. EFE