Imagen de archivo de la plaza de San Carlo, en el centro de Turín (Italia). EFE/EPA/ALESSANDRO DI MARCO
Roma.- La ciudad italiana de Turín (norte) será la anfitriona de la 66 edición del Concurso de la Canción de Eurovisión en 2022, al imponerse a otras 16 candidaturas del país, anunciaron hoy los organizadores del festival.
La gran final se celebrará en el PalaOlimpico turinés el sábado 14 de mayo, mientras que las semifinales se disputarán el 10 y 12 de mayo.
La capital del Piamonte será la tercera ciudad italiana en acoger el evento después de Nápoles (1965) y Roma (1991) tras la victoria en la última edición, con la canción “Zitti e buoni”, de la banda de rock italiana Maneskin, convertidos ya en todo un fenómeno de masas en todo el mundo y en las redes.
En la presentación de la candidatura turinesa, en julio pasado, la alcaldesa de la ciudad, Chiara Appendino destacó como uno de sus grandes valores las infraestructuras de la ciudad, en condiciones de acoger a las miles de personas que asisten a Eurovisión cada año, y en particular un aeropuerto internacional que garantiza las conexiones aéreas con todo el mundo.
Italia es uno de los países fundadores de Eurovisión, en 1956, y está en el “Big Five”, el grupo de cinco países que más aportan económicamente a la Unión Europea de Radiodifusión (EBU), con Alemania, España, Francia y Reino Unido, con una plaza fija en la final.
La historia italiana en el concurso, que abandonó en 1997 y al que no regresaría hasta 2011, está laureada con tres victorias- la primera en el remoto 1964 con “Non ho l’età” de Gigliola Cinquetti, seguida por “Insieme- 1992” de Toto Cutugno en 1990 y Maneskin.
Con el primer triunfo, Italia organizó en 1965 la décima edición de Eurovisión en Nápoles (sur), mientras que con el segundo, para el que se había barajado la opción de Sanremo (noroeste), finalmente se optó por Roma en 1991, en concreto por los estudios de Cinecittà.
La organización de la edición de Eurovisión de 2020, un evento seguido cada año por más de 200 millones de espectadores en todo el mundo, había suscitado el interés de diecisiete ciudades italianas.
Además de grandes ciudades como Roma, Milán, Bolonia, Trieste, Nápoles, Venecia, Génova o Florencia, habían manifestado su disposición a acoger el concurso otras como la antigua Matera (sur), capital europea de la Cultura en 2018; Sanremo, donde cada año tiene lugar el festival de la canción italiana o la costera Rimini.