La burbuja para atletas y técnicos, todo un desafío logístico para Pekín 2022

La burbuja para atletas y técnicos, todo un desafío logístico para Pekín 2022

La burbuja para atletas y técnicos, todo un desafío logístico para Pekín 2022

La burbuja para atletas y técnicos, todo un desafío logístico para Pekín 2022

Pekín.- Los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022, que comenzarán el próximo viernes, contarán con excepcionales medidas de prevención contra la covid-19 que incluyen el total aislamiento de atletas y trabajadores llegados del exterior con respecto de la población pequinesa durante toda su estancia.

China recoge así el testigo de los primeros Juegos que se celebraron desde el comienzo de la pandemia, los de Tokio 2020, cuya organización también aplicó un estricto protocolo sanitario anticontagios.

En aquella ocasión, se logró evitar cualquier infección entre los implicados en el evento y la población local y viceversa, según datos de los anfitriones, aunque, al contrario que Tokio 2020, el sistema de circuito cerrado de Pekín 2022 -también llamado burbuja- tendrá que enfrentarse a la contagiosa variante ómicron.

DOS UNIVERSOS PARALELOS

Desde que el protocolo de circuito cerrado comenzara oficialmente el 4 de enero, justo un mes antes de la inauguración de los Juegos Olímpicos, los atletas y especialistas llegados del exterior son recibidos en el aeropuerto por personal ataviado con trajes protectores y sometidos a pruebas PCR, tras lo cual no tendrán ningún contacto con la población pequinesa.

Le invitamos a leer: 100 Días de incógnitas para la burbuja de unos Juegos Paralímpicos históricos

“Me escoltaron tres coches de policía durante mi trayecto en un autobús vacío hasta el hotel”, explica a Efe Eduardo, un integrante de la burbuja que prefiere usar un pseudónimo. “Los primeros días son estresantes”, afirma Eduardo, porque “no sabes si te van a llamar por ser un contacto cercano o por haber dado positivo a la llegada».

No en vano, desde el 23 de enero, se han registrado 163 positivos entre miembros de la burbuja a su llegada a la capital china, según los organizadores. A partir del aterrizaje, los huéspedes del circuito cerrado reciben pruebas PCR diarias, las cuales ya ascienden a 531.968 desde el 23 de enero, habiendo detectado 232 positivos.

“Uno se acostumbra a los controles diarios”, asegura Eduardo, que añade que la atmósfera y la relación entre los habitantes de la burbuja “es normal”, exceptuando la dificultad de “las interacciones cuando la gente habla en un idioma que no es el suyo detrás de una mampara y con mascarilla”, la cual hay que “tener puesta todo el tiempo menos cuando se come o se bebe».

“Todos somos conscientes de que hemos venido a hacer un trabajo y muchos estaban hechos a la idea antes de llegar”, explica.

UN ROMBECABEZAS LOGÍSTICO

La burbuja se extiende al transporte entre las tres sedes de los Juegos- la propia Pekín y Yanqing y Zhangjiakou, a 80 y 180 kilómetros, respectivamente, del centro de la capital. El transporte se efectuará mediante vehículos marcados especialmente como pertenecientes a la burbuja, con cuyos pasajeros los conductores de Pekín han de minimizar el contacto incluso en caso de colisión, según directrices de las autoridades viales de la capital.

Le invitamos a leer: Delegación suiza para Pekín 2022 sugiere aplazar los JJOO por la pandemia

Los vagones del tren de alta velocidad que conecta las sedes también estarán segregados entre pasajeros corrientes y los miembros de la burbuja.

“La logística funciona bien”, lo que incluye la paquetería entre los centros de trabajo- “No esperas más de un día si tienes que recibir mercancía”, asegura Eduardo.

Incluso la basura producida dentro de la burbuja será gestionada aparte- un equipo de trabajadores especializados accederá al circuito cerrado para recoger los desperdicios, que se depositarán en un almacenamiento temporal independiente antes de su tratamiento.