El deporte es la actividad que más llama la atención en cualquier estamento de las sociedades, sean estas capitalistas, socialistas, comunistas o de cualquier otra índole.
Desde los mismos orígenes de la humanidad, el deporte en sus diferentes vertientes, ha sido un instrumento de primer nivel en la cultura e identificación de los pueblos.
Son muy pocos los indiferente a los eventos deportivos y a los resultados que se producen en competiciones regionales o internacionales, porque dependiendo de sus resultados se hacen comparaciones , ciertas o no, sobre la superioridad de un conglomerado sobre otros.
En República Dominicana existe desde hace décadas, una cultura deportiva muy avanzada, fruto de las hazañas que han materializado decanas de compatriotas en escenarios locales e internacionales.
La importancia es tal, que la casi totalidad de los medios de comunicación, desde hace tiempo, ofrecen más cobertura a los deportes que a la propia economía, que es m ucho decir.
Empero, en los últimos años se ha producido una corrida prácticamente total, de las empresas nacionales que fueron la base fundamental en apoyo a los deportes.
Quizá hace menos de una década, hasta los colmados y otros establecimientos ubicados en diferentes sectores y barrios, lo apoyaban de una u otra manera.
Hoy para montar un torneo cualquiera, por necesidad hay que recurrir a la ayuda de algún funcionario público, a los que en “agradecimiento” se les dedica el evento.