Julian Strawther aporta chispa desde el banquillo, incluso pierde un diente, mientras los Nuggets fuerzan el séptimo juego
Ahora este era finalmente un papel en el que Julian Strawther podía hincar el diente, incluso si eso le costaba dinero.
Tras jugar muchos minutos por primera vez en la serie, el base de los Denver Nuggets brilló desde el banquillo al anotar sus 15 puntos en la segunda mitad el jueves por la noche. Su gran actuación impulsó a Denver a una victoria por 119-107 sobre el Thunder y forzó un séptimo partido el domingo en Oklahoma City.
«Ese es el momento con el que sueñas cuando eres pequeño: venir al juego, que todos los chicos crean en ti, te encuentren en tu lugar y puedas tener un impacto en el juego», dijo Strawther, un jugador de segundo año de Gonzaga.
Strawther lo dejó todo en la cancha, incluyendo un diente (protésico) que se le salió en el último cuarto al recibir contacto con un jugador de Oklahoma City. Intentó que los árbitros detuvieran el juego lo suficiente para recogerlo. Pero la acción ya se estaba desviando.
Un recogepelotas lo recogió con una toalla y lo devolvió a la banca. Para cuando Strawther atendió a los medios después del partido, ya lo había vuelto a colocar.
Explicó que después de perder un diente de leche cuando era niño, la versión adulta, ubicada en el lado derecho al lado de su diente frontal, nunca creció.
“Lo recuperamos”, dijo Strawther.
Así, sin más, los Nuggets regresan a OKC. Era su única misión tras desperdiciar una ventaja en el último cuarto y perder allí el quinto partido.
La banca de los Nuggets tuvo un gran impacto detrás del juego de Strawther, Russell Westbrook (ocho puntos) y Peyton Watson (cuatro).
Claro, los reservas del Thunder los superaron en puntos 32-27. Sin embargo, antes del jueves, el rendimiento promedio de la banca era de 34-22 en cinco partidos a favor del Thunder.
«Julian estuvo increíble», dijo Nikola Jokic, quien anotó 29 puntos, capturó 14 rebotes y repartió ocho asistencias. «Fue el artífice de los puntos clave, de los momentos clave del partido».
Strawther terminó con 3 de 4 en triples y 4 de 4 en tiros libres. Sobre todo, ayudó a los Nuggets a mantener el impulso en el último cuarto, mientras Jokic se sentaba en el banquillo para descansar. Strawther jugó 19 minutos y medio, su mejor marca en playoffs.
Esto después de estar limitado a 14 minutos combinados en los últimos tres juegos, incluido un “DNP” (no jugó) en el Juego 3. El entrenador interino David Adelman le dijo que se mantuviera listo.
Él escuchó.
«Entiendo que hay noches en las que quizás no me registre», explicó Strawther. «Y hay noches como esta en las que él viajará conmigo.
“(Adelman) y yo hemos tenido una relación transparente durante estos playoffs, y estoy realmente agradecido por haberme puesto en el equipo esta noche”.
Su papel podría aumentar aún más dependiendo del estado de Aaron Gordon, quien se lesionó el tendón de la corva izquierdo hacia el final del juego.
«Me siento bien. Ya veremos», dijo Gordon después del partido. «Voy a empezar la recuperación ahora para asegurarme de estar listo para el séptimo partido».
Otro jugador que encontró su ritmo fue el alero Michael Porter Jr., lesionado, quien encestó 4 de 9 para 10 puntos. Ha estado lidiando con una torcedura en el hombro izquierdo.
“Con lo que he pasado, tengo que controlar muchas cosas adicionales”, explicó Porter, quien dijo que le inyectaron lidocaína en el hombro antes del sexto partido y que planea recibir otra de cara al domingo. “Desde que me lesioné el hombro, no puedo controlar todo como quisiera. No me siento tan cómodo ni seguro con mi tiro como quisiera durante estos playoffs”.
Pero sigo ahí, intentando abrir la cancha y tirar cuando me llega, ya sea que entre o salga. Solo tengo que mantener la confianza.
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