Es preocupante que todavía muchos jugadores de primer nivel no hayan firmado para la próxima temporada de Grandes Ligas, cuando la temporada prácticamente está al doblar la esquina.
Se sabe que históricamente muchas organizaciones, se benefician económicamente, esperando hasta el último momento para pactar.Aunque los informes que llegan aseguran que varios equipos, están interesados, por ejemplo, en Nelson Cruz, hasta la fecha no se ha confirmado absolutamente nada.
Mientras el hacha va y viene, y el tiempo apremia, esas mismas vicisitudes están experimentando otros jugadores dominicanos.
En el aspecto sicológico ese status afecta un mundo, porque la inseguridad provoca efectos muy dañinos.
Abrigamos la esperanza de que esa incómoda situación que viven hoy estos peloteros, tenga una rápida y satisfactoria salida.
El control mental es prioritario
No todo el que se convierte en líder tiene la mente bien puesta para lidiar apropiadamente con sus propios seguidores y mucho menos con sus adversarios.
Esos líderes, que alcanzan la cúspides en sus respectivas disciplinas, deben tener siempre presente que deben tener la cabeza bien puesta para no errar ante las provocaciones.
El no manejar correctamente muchas provocaciones han resultado lamentables y les coloca un sello permanente de irracionalidad y desorden mental.
El caso más reciente, lo produjo el lunes pasado el estelar Lebron James, cuando perdió los estribos al dejarse provocar de dos fanáticos de los Hawks de Atlanta.