Juan Mercado
Al concluir la actual temporada de Grandes Ligas, los jugadores dominicanos tendrán muchos desafíos qué cumplir, especialmente aquellos que tienen pendientes de discutir sus salarios para la próxima campaña a través del arbitraje salarial o la agencia libre.
La reducción de la vuelta regular a 60 juegos dejó muy mal parados a gran parte de los peloteros que no pudieron calentarse desde el inicio.
Entre los pocos que sobresalientes están Nelson Cruz y Marcell Ozuna, quienes irán cómodos a las discusiones para nuevos contratos en la agencia libre.
Pero otro grupo, encabezado por Edwin Encarnación y Carlos Santana, que tuvo una temporada regular muy por debajo, no puede decir lo mismo.
Es casi seguro que los Medias Blancas y los Indios rechacen las opciones salariales que tienen de Encarnación y Santana para el 2021.
Para el año entrante, los Medias Blancas tienen la opción de US$12 millones de Encarnación y los Indios otra de US$17.5 millones para Santana, quien concluyó su contrato de tres años y US$60 millones.
Edwin, un veterano de 37 años, apenas bateó .157, con 10 jonrones y 19 impulsadas en 44 juegos en su primera campaña con los Medias Blancas. Con la política de los equipos de no contratar jugadores de edad avanzada, es penoso decirlo, pero la pasada pudo haber sido la última participación de Encarnación en las Mayores.
Santana bateó para .199, con ocho jonrones y 30 empujadas en 60 juegos. Quizás esa cantidad de juegos no le permitió poner números similares a los de 2019, cuando bateó .281, con 34 jonrones y 93 remolques.
Los que van al arbitraje salarial y no les fue bien, recibirán reducciones en sus sueldos, que quizás no sean justos, pero así es el negocio.
