Jugadores de los Tigres del Licey celebran en el terreno durante el partido de anoche en el estadio Quisqueya. Alberto calvo
Santo Domingo.-El bateador designado de los Tigres del Licey, Jorge Alfaro (Acuaman) resaltó anoche el juego aguerrido y la unidad que vivió en la cueva azul durante toda la serie final del torneo de béisbol profesional dominicano, y aseguró que esa fue la clave para que el equipo que dirige José Offerman venciera a las Estrellas y se coronara campeón por vigésima tercera ocasión.
“Un gran ambiente es el que existió siempre en el club house, el cual llevamos al terreno de juego y creo que ahí estuvo la diferencia”, señaló Alfaro, quien fue el mejor bateador de los azules durante toda la serie final.
Rojas Jr. agradecido
De su lado, Melquíades Rojas Jr., quien empujó las dos vueltas de la victoria azul contra los verdes, dijo que agradece a Dios y sus compañeros la oportunidad de poder contribuir a que mi equipo se llevara su tercera corona.
En iguales términos se expresó el lanzador derecho Esmil Roger, uno de los pilares del cuerpo monticular de los azules”, quien aseguró que siempre estuvo confiado en el triunfo.
Al bate
— Confiado
“Fui a ese turno tan importante para mi equipo a buscar un buen picheo de Dairon Blanco y tuve la fortuna de que me sirvió algo bueno para batear”, reveló Mel Rojas.