En el pasado articulo esbozamos que La Guerra Restauradora no es la auténtica guerra independentista, sino la del 27 de Febrero de 1844, creada, gestionada, dirigida por Juan Pablo Duarte y Diez, que desde antes de esta fecha fomentó la base de lo que hoy es República Dominicana
Afirmamos que Duarte es el Único Fundador de la Patria y lo dijimos así: “Entendemos que “La Guerra de la Restauración” fue la reconquista de la Independencia Nacional, ideada y capitaneada por Juan Pablo Duarte, sin ese hecho épico del único fundador de la patria, no hubiese existido la llamada “Restauración” de la soberanía nacional”
Lo interesante y para nuestra sorpresa fue la afirmación del profesor, historiador, doctor Roberto Cassá, director del Archivo General de la Nación, quien puso a circular la obra de su autoría, “Antes y después del 27 de febrero”, en la que plantea que Juan Pablo Duarte es el único Padre de la Patria
Por cosas del azar en la vida, nosotros coincidimos con el reputado y destacado historiador, que además dijo demostrar que la estructuración de la trilogía fue una salida, evasión o huida manipulada por parte del presidente de entonces, Ulises Heureaux, para resolver disputas entre los historiadores de la época
También se destaca que hubo tergiversaciones a la memoria histórica por parte de la prensa a partir de 1845 y pone de ejemplo de cómo se le dio mayor protagonismo a Pedro Santana y la absurda exclusión de algunos febreristas, a quienes la dictadura los encasilló de traidores, utilizando como medio la prensa
Nosotros, en un momento dado, hasta llegamos a pensar en una AGENDA NO PLANEADA y puesta en marcha de forma espontánea para restarle méritos a Duarte, puesto que hay historiadores y siquiatras que han escrito para “disque humanizar” a Duarte y ponerlo a la altura de cualquier ser humano
Pero es todo lo contrario, personas como Juan Pablo Duarte, nacen cada 100 años quizá, porque si lo analizamos bien, fue un hombre sin mácula, íntegro, realmente, se asemeja mucho a Cristo, porque lo dio todo a cambio del amor al prójimo y a su patria, y para hacer eso, hay que tener una fuerza de voluntad y un carácter fuerte
Reiteramos que Duarte es el Único Padre de la Patria, Republica Dominicana, quien se la jugó y nos dio nombradía, un estatus político, y nos marcó la ruta a seguir, pero por culpa de esos malos dominicanos, conservadores al extremo, truncaron como siempre, el digno rumbo que debió recorrer el país
Admito que no he comprado el libro, pero luego de la publicación de esta columna voy a salir a comprarlo y les hablaré de ese libro “Antes y después del 27 de febrero”
@RamonLoraR
