El ex presidente uruguayo José Mujica fue internado en el hospital Casmu de Montevideo, donde se estima que permanecerá durante entre 24 y 48 horas, informó el noticiero Telemundo de Canal 12. El dirigente político, de 89 años, ha tenido complicaciones el la recuperación del tratamiento de un cáncer de esófago.
En el inicio de la semana, su ausencia en algunas actividades partidarias había causado sorpresa. Para la militancia del Frente Amplio, la coalición de izquierda de Uruguay, el 25 de agosto es un día particular. Los frenteamplistas celebran el Día del Comité, una instancia en la que los dirigentes de la fuerza política recorren los centros barriales. La instancia de este domingo tuvo una ausencia notoria: la del ex presidente José Mujica.
Mujica se ha concentrado en los últimos días en comer más. “En esa lucha estamos”, dijo Topolansky.
Mujica trató su tumor de esófago con un tratamiento de radioterapia, que implicó 32 sesiones. Esta instancia terminó a fines de junio, cuando el histórico dirigente, de 89 años, comenzó con una de las etapas más difíciles de su enfermedad.
La médica personal de Mujica, Raquel Pannone, aseguró a la agencia Efe que la evolución del ex presidente fue “muy buena” pero indicó que la recuperación “le está costando mucho”. El mandatario está siendo controlado “día a día”, señaló. Mujica tiene otras patologías previas –como una enfermedad autoinmune– que condicionan su recuperación.
“La rehabilitación le está costando mucho. Se hizo radioterapia y eso le generó algunos síntomas que no está terminado de superar. No es por su enfermedad de base, no es porque tenga ninguna otra complicación. Al contrario, la evolución con respecto al tumor de esófago fue muy buena”, destacó la médica.
“Lo estamos controlando y haciendo todo lo posible para que se pueda recuperar”, subrayó Pannone.
Entrevistado la semana pasada por The New York Times, Mujica dio detalles de su recuperación. “Me hicieron tratamiento con radiología. Según los médicos, anduvo bien, pero yo estoy deshecho”, declaró.
Aunque el panorama es positivo desde el punto de vista clínico, el ánimo y la salud del expresidente están golpeados por las consecuencias del tratamiento. Topolansky dijo días atrás en El País que Mujica está con “muy debilidad” y que comienza con la recuperación de fuerzas.
El paciente comenzó a caminar alrededor de la casa y hasta la calle para recuperar las fuerzas que le quitó el tratamiento. Tiene un aparato para posicionar los pies encima, que provoca un movimiento similar al de estar caminando mientras está sentado. “Estás leyendo y estás haciendo ejercicio”, explicó Topolansky.
El dirigente está comiendo poco por el dolor que tiene en la parte lesionada del sistema digestivo. La idea de esta parte de la recuperación es que “se abra el apetito” de a poco. “Estos procesos, por lo que nos han dicho, son así: llevan su tiempo”, comentó la esposa. “Él está bien, pero peleando para poder estar mejor. Está en un repecho, tiene que subir para poder tener todas las energías”, aseguró.
Por el dolor del esófago, Mujica solo puede tomar topa. Además, consumía una medicación para desinflamar la zona que le altera el sueño.
Mujica participó de algunas actividades de cara a las elecciones presidenciales de este año de Uruguay, pero su presencia estuvo lejos de ser la de otros años, cuando asistía a varios actos por día. Topolansky recordó que en otros ciclos electorales llegó a hacer ocho actos diarios. “Es como un perro que está atado a la cadena, y todavía sin comer. Es bravo”, dijo.
Fuente: Infobae