En la pelota dominicana hay tanto irrespeto para el cargo de mánager, que José Leger decidió regresar al puesto de coach de banca con el Escogido y no como dirigente…
Él alegó ocupaciones en Grandes Ligas y “bururún bararán”, pero, y aquí está el bendito pero, fue que de seguro pensó que si es verdad que le pidieron la renuncia a Luis Rojas, imagínense lo que pasaría con él…
Y apuesto una fundita de agua con cualquiera que Arturo de Freites está feliz de que los Toros lo regresaran al cuerpo técnico y no lo dejaran de mánager, porque ahí dura años, pero como mánager solo una mala rachita y la presión de los fanáticos… Así es en Licey, donde cuando algunos fanáticos piden a Fernando Ravelo como gerente de nuevo, su carcajada estremece la oficina entera, porque con lo cómodo que está, cobrando el año entero, no es verdad que regresará a someterse al escrutinio de la fuñidera de los fanáticos.
¡Porque jooooden, que eso manda madre!.. La cosa es tan fuerte que Mallencito ganó y se va, ya que sabe que en lo adelante la presión será mayor, porque los fanáticos verdes ya saben que tienen con qué ganar y serán implacables…
Es igual que en los Gigantes, a donde Pipe Urueta no quiere ir como dirigente y prefiere quedarse en Licey, junto a su pana full y protector Junior Noboa, antes de someterse a unos de esos piques que le dan al dueño Samir Rizek… Y de las Águilas ni hablar, ahí si es verdad que hay presión el año entero…
¡Psss, no fue un “pajarito”, fue un “pajarote”, fue un Águila!.. Izquierda de Félix… ¡Ya ya ya, déjalo ahí Chispero.
