Santo Domingo.-Es un rostro que da paz, la gente lo sabe querer y es por eso que José Guillermo Cortines lleva 20 años de carrera y está posicionado como una de las figuras más tranquilas del entretenimiento.
Con su trabajo actoral, en donde tiene grabadas casi 15 telenovelas, Cortines ha logrado trascender y llegar a países como México, Colombia, Miami y hasta en Asia, donde se han visto sus telenovelas.
Su carrera ha transcurrido entre los musicales, obras de teatro, películas, telenovelas y el canto, cosas que hace no como un trabajo, sino como algo que le apasiona.
Ahora, siendo padre de una adolescente de 16 años (Mara Cortines) y cumpliendo 43 años de edad, el actor anuncia que va a ser papá de nuevo con su esposa Dominique Bonelly, con quien lleva once años de casado. Está contento y feliz porque las cosas le están saliendo bien.
En algunas semanas viajará a Miami a grabar una nueva telenovela con la cadena Telemundo, por lo que tendrá que ausentarse por tres meses del programa de televisión Chévere Nights, donde trabaja como presentador y en donde se siente una persona feliz.
Nuestro papel
También estrenará muy pronto la película “Pasa’o de libra”, su tercera película con Roberto Ángel Salcedo, del que dijo es un excelente profesional con el que se siente agradecido de poder trabajar.
El filme llegará a las salas de cine en este mes, con los protagónicos de Luis José Germán, Carlos de la Mota y Carlos Sánchez. Aquí “Memo” hace de un médico.
La televisión
Inició su carrera en la televisión cuando tenía 21 años de edad, le preocupa mucho el rumbo de la televisión actual.
Porque se ha dado cuenta que desde hace mucho tiempo lo sano y bueno no vende, que la gente está infectada por el virus de la morbosidad y solo buscan cosas en las que aparecen las cosas implícitas.
“Yo acepté estar en el programa Chévere Nights porque este no se alimenta del morbo, Milagros Germán cuida mucho su contenido y busca siempre que la gente se vaya a dormir con algo positivo en la mente”, dijo.
Mayor apoyo
Le gustaría que las publicitarias apoyaran las cosas sanas, que no obliguen a los productores hacer una televisión mala solo para vender.
El canto lo dejó de lado por la payola y porque tenía que ampararse de una persona que pusiera el dinero.
“Para sonar no quería irme por la parte ilegal, pagar para sonar no va conmigo. No soy amarillista”, agrega.