BRASILIA.-El publicista Joao Santana y su esposa Mónica Moura denunciaron este martes el movimiento irregular de dinero en todas las campañas electorales en que participaron desde 2006 hasta el año pasado en Brasil y otros países latinoamericanos.
Joao Santana y Moura informaron ilegalidades en las campañas de los expresidentes Luiz Inacio Lula da Silva y Dilma Rousseff, ambos de PT. Los cargos siguen la misma línea de la ya formulada por ex ejecutivos de la contratista Odebrecht, dijo a O Globo una fuente vinculada al caso.
Santana fue el publicista de las tres últimas elecciones presidenciales del PT: 2006, cuando Lula ganó; y 2010 y 2014, cuando Dilma Rousseff ganó la disputa.
Según el periódico, el publicista y su esposa también han reportado irregularidades en las campañas de Hugo Chavez, ya fallecido, y Nicolas Maduro, Venezuela, Maurício Funes, El Salvador, Danilo Medina, la República Dominicana y José Eduardo dos Santos en Angola.
«Ninguna de las campañas en las que participaron se quedó fuera de las delaciones», indica O Globo.
Las irregularidades están relacionadas con los pagos por los servicios prestados.
Los cargos siguen la misma línea de la ya formulada por ex ejecutivos de la contratista Odebrecht.
Los acuerdos entre las autoridades y Santana, su esposa, y de André Santana, quien trabaja con la pareja, fueron aprobados ayer por el ministro Edson Fachin, relator de la Operación Lava en el Tribunal Supremo Federal (STF).
Ahora corresponde al fiscal Rodrigo Janot fijar las investigaciones que se pedirán a partir de estas denuncias. Janot debe hacer los arreglos a partir de la semana próxima, cuando estará de regreso a Brasil.
Joao Santana y su esposa confirmaron las denuncias de ejecutivos de Odebrecht sobre las campañas de Lula y Dilma y, en algunos casos, añadieron nuevos datos a las investigaciones. Las negociaciones se iniciaron hace más de un año y sólo se cerraron recientemente después de algunos avances y retrocesos.
En principio, Santana y Mónica trataron de llegar a un acuerdo con una información de que pagaron indebidamente un corte de pelo y un teleprompter utilizado por Dilma en la campaña de 2014.
Empero, la sugerencia fue rechazada y los dos tuvieron que apelar a su memoria por nuevos hechos. Las negociaciones se mantuvieron en secreto hasta ayer martes, cuando, a juicio en el Tribunal Superior Electoral, el subprocurador general electoral, Nicolão Dino, se refirió a los acuerdos. Los abogados Juliano Campelo, Beno Brandão y Alessi Brandão confirmaron en un comunicado la aprobación de las colaboraciones. “Pero no puedo comentar sobre el contenido del acuerdo, son confidenciales,” dijo.