Iván García, se fue una leyenda del teatro

Santo Domingo.-Sin lugar a dudas que el teatro dominicano ha perdido a uno de sus mejores actores, con la muerte del dramaturgo Iván García.

Su fallecimiento el sábado puso a más de uno triste y la nostalgia se apodero de sus compañeros.
El 26 de este mes cumpliría sus 87 años, y su nacimiento se dio en 1938 en San Pedro de Macorís.

Los restos del dramaturgo y escritor fueron velados en la Funeraria Blandino y los familiares en privacidad decidieron la hora y lugar de sepultura.

Su legado va más allá de los escenarios. García fue un pilar del movimiento teatral, y su nombre siempre estará vinculado a algunas de las producciones más significativas del teatro dominicano. Fue reconocido con el máximo galardón de los Premios Soberano en 2015, el Gran Soberano.

La comunidad artística y el sector cultural lamentaron profundamente la desaparición de un hombre que se entregó por completo al arte, no sólo como intérprete, sino como formador, director y mentor de jóvenes talentos.

«Iván García fue un maestro, un referente y un ejemplo a seguir en el mundo del teatro. Su pasión por el arte y su dedicación fueron incansables. Hoy, más que nunca, sentimos que el teatro dominicano ha perdido una de sus mayores figuras», expresaron desde la Asociación de Teatristas de la República Dominicana (ATRAD).

El ministro de Cultura, Roberto Ángel Salcedo, expresó su profundo dolor ante el deceso de Iván García: “Lamento profundamente el fallecimiento de Iván García, un extraordinario maestro de la actuación, director, dramaturgo; gran defensor de la cultura con quien tuve el privilegio de trabajar», dijo.
Iván García, en varias entrevistas dejo claro como se sentía con su carrera profesional.

“Nunca me he sentido héroe, hago las cosas porque así lo siento», compartió en una entrevista con EL DÍA en 2025.

Estas palabras reflejaban en ese entonces una humildad genuina, algo que se repite a lo largo de toda la conversación.

A pesar de su prestigio y los premios que lo han reconocido, Iván siempre mantuvo los pies firmemente plantados en la tierra, destacando la importancia de la familia como el verdadero motor de su vida.

Entre las obras que marcaron su carrera se encuentran “El divino impaciente”, “Esperando a Godot”, “Edipo Rey”, “Duarte, fundador de una república”, “Rashomon”, “La ópera de tres centavos”, “Las brujas de Salem”, “La Bella y la Bestia”, “Amadeus” y muchas otras.

En sus años de carrera, Iván García Guerra también destacó por su humildad y aprecio por la vida familiar.

Luto en el teatro

— Legado
Iván García deja un legado artístico que será recordado por generaciones. Con su partida, se apaga una de las luces más brillantes del teatro nacional, pero su influencia perdurará en cada acto, en cada obra que interpretó.