Jerusalén.-El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, volvió a insistir ayer en sus críticas a la Casa Blanca por, aseguró, ralentizar el envío de armamento a Israel, mientras el país continúa con sus ataques en Rafah (Gaza) y las fuerzas avanzan hacia el noroeste de la localidad.
“Hace unos cuatro meses hubo una caída dramática en el suministro de armamento que llegaba de Estados Unidos a Israel. Durante muchas semanas hicimos un llamamiento a nuestros amigos estadounidenses para que aceleraran los envíos”, dijo el mandatario al comienzo de una reunión del Ejecutivo.
Por eso, explicó, decidió hacer un llamamiento público el pasado 18 de junio, cuando se grabó él mismo en inglés diciendo que le parecía “inconcebible” que la Casa Blanca haya retenido armamento para Israel.