El Parlamento iraní convirtió ayer en ley -con una abrumadora mayoría de votos- las “líneas rojas” del régimen para llegar a un acuerdo nuclear con los países del Grupo 5+1 y que exigen el fin de las sanciones, la prohibición de inspeccionar centros militares y preservar el derecho iraní al I+D nuclear.
La normativa, que ahora deberá ser aprobada por el Consejo de Guardianes, organismo iraní que hace las veces de Tribunal Constitucional y Senado, para entrar en vigor, fue aprobada con 213 votos a favor y tan solo 10 en contra por la Asamblea Consultiva Islámica.
De ratificarse, el Gobierno del moderado Hasán Rohaní se verá obligado a cumplir con el texto de la legislación para poder hacer efectivo cualquier acuerdo nuclear, lo que puede complicar la capacidad de maniobra de sus negociadores para llegar a un pacto que satisfaga a los representantes de Estados Unidos, China, Francia, Rusia, Reino Unido y Alemania con los que mantienen conversaciones.
La primera de ellas será la eliminación “inmediata y completa” de todas las sanciones impuestas por el Consejo de Seguridad de la ONU, la Unión Europea, y el Congreso y el Gobierno de los Estados Unidos el mismo día que entre en vigor el pacto .