Santo Domingo.- La inclusión financiera muestra avances, pero aún enfrenta desafíos estructurales, especialmente para la población migrante y en materia de sostenibilidad.
Uno de los principales obstáculos identificados es el acceso de los migrantes al sistema financiero formal.
Según los datos levantados, un 48% de las personas migrantes señaló haber tenido que presentar documentación adicional al solicitar productos financieros, lo que evidencia procesos de verificación más estrictos o una falta de criterios uniformes entre las entidades de intermediación financiera (EIF), de acuerdo con un informe de la Superintendencia de Bancos.
Explica que a esto se suma la carencia de historial crediticio, un factor que limita la posibilidad de acceder a cuentas, créditos y otros servicios básicos.
A pesar de estas barreras, el nivel de confianza en las instituciones financieras es elevado, ya que el 77% de los migrantes afirmó tener total confianza en su entidad principal.
En respuesta, el estudio señala que algunas entidades han comenzado a implementar mecanismos de inclusión, como cuentas básicas, productos simplificados y programas de remesas con costos reducidos.
No obstante, la SB advierte que el alcance de estas iniciativas sigue siendo limitado y no logra cubrir a toda la población objetivo.
Brecha de género
El informe muestra que el acceso a cuentas de ahorro, uno de los principales indicadores de inclusión financiera, también presenta diferencias por género.
Las EIF reportaron que el 52% de las cuentas de ahorro pertenece a hombres, mientras que el 48% corresponde a mujeres.
“Si bien la brecha no es amplia, los datos reflejan una participación masculina ligeramente superior en el uso de este producto financiero básico”, sostiene el informe.
Por tipo de entidad, aclara que las asociaciones de ahorros y préstamos (AAyP) y los bancos de ahorro y crédito (BAC) concentran la mayor proporción de cuentas de ahorro, consolidándose como actores clave en la profundización de la inclusión financiera en el país.
La sostenibilidad se perfila como un eje estratégico dentro del sistema financiero dominicano. El 45% de las entidades financieras indicó contar con políticas vinculadas a este enfoque, con acciones centradas en eficiencia energética, reciclaje, gestión de residuos y financiamiento verde.
Asimismo, el informe muestra que el 39% ofrece productos financieros sostenibles, principalmente préstamos para la instalación de paneles solares, reformas estructurales y la adquisición de vehículos eléctricos.
Desde la perspectiva de los usuarios, el interés es significativo, ya que el 65% considera la sostenibilidad como un aspecto muy importante en los servicios financieros.
Sin embargo, revela que persiste una brecha de información, ya que el 43% de los clientes desconoce si su entidad ofrece productos sostenibles.