La mayoría de los economistas en su etapa formativa se familiarizaron con el concepto de especulación cuando analizaban las características de los mercados, pero algunos llegaban a pensar que esto solo se limitaba al modelo de oferta y demanda. Por igual, es muy común que los economistas se dediquen a estudiar los datos correspondientes al análisis cortoplacista sobre la evolución de los indicadores macroeconómicos.
Por la razón expuesta es que la economía ha avanzado de manera contundente en desarrollar modelos que permitan pronosticar con cierto grado de precisión como será el comportamiento de la economía de un trimestre a otro, incluyendo un trimestre adicional hacia delante. Sin embargo, cuando la temporalidad se extiende a más de tres trimestres o un año, entonces, la predicción tiende a perder fiabilidad y termina siendo poco útil.
Los modelos de predicción económica generalmente utilizan las herramientas que proporciona la econometría con cierto grado de confianza, pero resulta que los grandes eventos económicos se producen sin una explicación determinada y por esa razón la mayoría de la crisis sorprenden a todos los analistas por el nivel de complejidad con que se manifiesta cada una. Siempre es aconsejable interpretar los datos económicos presente y pasado para ser cauto con las predicciones económicas y hacer la ponderación tomando en cuenta lo que ocurre en el entorno económico, político y social.
Es relevante destacar que se pueden tener mediciones económicas similares, pero puede ocurrir que cada economista lo interprete de una forma diferente por el hecho de que cada cual estará influenciado por el manejo de la teoría económica que le sirva de sustentación a sus observaciones. Existe una razón poderosa que determina cada interpretación proyectada; por un lado, estarán los intereses y posición que defienda y ocupe, mientras que, por otro lado, estará determinado por la formación y experiencia del analista.
La línea frágil existente es lo que provoca que las noticias económicas se difundan con cierto grado de facilidad y hasta se puedan convertir en viral, llegando a la característica de noticias falsas, o fake news, pero resulta que las consecuencias de difundirla son espantosas, esto así porque en el plano económico se traducen en pérdidas millonarias y cuya recuperación es impredecible. En la actualidad, las noticias económicas falsas, o fake news, se viralizan a una velocidad inimaginable a través de las redes sociales y sus efectos económicos tienden a ser desastrosos para el sistema económico en general.
Tan solo imaginar noticias falsas sobre el sistema bancario, la bolsa de valores, la industria alimentaria, el sector turismo y de bebidas gaseosas produce una hecatombe económica en lo inmediato. Por igual, los gobiernos deben difundir noticias económicas con mucha cautela y no ponerle plazo al crecimiento del PIB y la recuperación de la economía, máxime cuando se transita por una crisis en desarrollo, al tiempo que las noticias económicas deben ser difundidas por quienes puedan defenderlas.
Como se sabe, el fake news, o noticias falsas, es el arte de sembrar dudas, por lo que la misma se ha convertido en un poderoso enemigo invisible para la economía en su conjunto, pero que en tiempos de crisis es más peligroso. Esto así ya que el funcionamiento de toda sociedad descansa en la dinámica de su economía y se debe estar muy consciente que se está ante la presencia de la era digital donde las redes sociales se han convertido en una fuente relevante de noticias que con cierta facilidad destruyen a los diferentes sectores económicos.
Las noticias económicas falsas, o fake news, se ha transfigurado en el virus más riesgoso de la economía global y su incidencia es tan peligrosa como la propia pandemia que afecta al mundo, a los gobiernos, a las empresas y a las instituciones. Se trata de que en dicha modalidad confluyen la teoría económica del crimen, la teoría económica de la elección publica, y en el cual pierde la economía y la sociedad en su conjunto, siendo su peor incidencia.