Santo Domingo.- La Iglesia Católica pidió hoy el que se flexibilice el horario de circulación durante el asueto de la Semana Santa, no así la apertura de negocios de bebidas alcohólicas o que impliquen aglomeraciones de personas sin ningún control.
Alegaron que el recorte del toque de queda les limitaría celebraciones como la Vigilia Pascual y las visitas a los monumentos religiosos, especialmente jueves y sábado de la Semana Mayor, al tiempo que recordaron que las parroquias mantienen un estricto control sanitario para evitar la propagación de la COVID-19.
“Me parece muy injusto que la Semana Santa, que en su esencia es religiosa, discriminen limitando a la Iglesia en sus actividades. El presidente parece que se esta dejando mal asesorar por un grupo de gente que no les importa el arraigo religioso”, indicó el padre Manuel Ruíz de la Parroquia Santo Domingo.
Asimismo, los párrocos Gregorio Alegría, de la Capilla San Francisco de Asís y el reverendo Kennedy Rodríguez, de la Parroquia San Antonio de Padua en Gazcue, afirman que la medida afecta los cultos religiosos como es la Adoración al Santisimo que han sido tradiciones durante el referido asueto.
Otros religiosos, aunque no observaron esa limitante, valoraron el recorte de horario para evitar el desenfreno de la gente y para que las familias se concentren más en la reflexión, el recogimiento y pensar en cómo resolver la crisis que ha generado la pandemia.
Al referirse al decreto 171- 21 que establece el toque de queda de 7:00 pm a 5:00 de la mañana, a partir del jueves, viernes y sábado, el padre Alfredo de la Cruz Baldera, rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), lo ve bastante favorable porque así la gente se recoge más en sus casas y limita la venta de bebidas alcohólicas en lugares públicos.
“Con esto se ayuda a que la gente no se contagie con el COVID-19 y de manera especial que todo lo que es aglomeración de personas sea reducida”, externo Baldera.
Para el presidente de la Fundación Equidad y Justicia Social, y expresidente del Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE), Fidel Lorenzo la cuarentena ha ayudado a que las familias se reencuentren y causalmente esta limitante contribuye a que se enfoque más en la reflexión y asuma una vida mas balanceada y de espiritualidad.