Hutía y solenodonte, únicos mamíferos endémicos sobrevivientes de la isla

Hutía y solenodonte, únicos mamíferos endémicos sobrevivientes de la isla

Hutía y solenodonte, únicos mamíferos endémicos sobrevivientes de la isla

La mordida del solenodonte puede ocasionar infección.

Santo Domingo.-La hutia (Plagiodontia aedium) y el solonodonte (Solenodon paradoxus) son los únicos dos mamíferos endémicos que han sobrevivido de la lista de 25 especies que existían en la isla Española; ambos parecen un “retrato hablado de las ratas”, lo que provoca que la gente pueda confundirlos y maltratarlos.

De sus poblaciones solo quedan reductos o escasos remanentes, y la diferencia entre uno y otro es que el primero tiene nariz chata y color gris pardo, mientras el segundo posee una trompa más pronunciada y color vistoso amarillento.

“Son dos especies totalmente diferentes, aunque parecen ratones grandes, la hutía es más pequeña y no tiene trompa.

Están en condición crítica en la Lista Roja de República Dominicana, razón por la cual hay especial atención con estas”, manifestó José Manuel Mateo, director de Biodiversidad y Vida Silvestre del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

La hutía frecuenta el suelo y árboles, se comunica por silbidos.

La hutía frecuenta el suelo y árboles, se comunica por silbidos.

El ambientalista afirma que como resultado de la presión que han tenido los ecosistemas y desarrollo, sus poblaciones se encuentran en los lugares más recónditos, como son los Parques Nacionales Los Haitises, Jaragua, Sierra de Bahoruco y la Cordillera Central.

Agrega: “No obstante, suelen aparecer remotamente en sitios urbanos y ahí aflora el peligro de que los maltraten”.

Conservación

Cada especie tiene una implicación en el funcionamiento de los ecosistemas y el servicio ambiental que ofrecen a la sociedad, de ahí la necesidad de conservarlos y regularlos.

Comparación de rol

Por ejemplo: un vehículo tiene tres espejos, uno en el centro y dos laterales, si se rompe uno de los lados, el conductor sigue y dobla fácil, pero un día al retroceder puede accidentarse de forma fatal”, comenta Mateo Féliz haciendo un paralelo.

Asimismo ocurrirá si estas especies desaparecen por completo, puede aumentar otros individuos que ellos se comen, que pueden ser patógenos o dañinos para los seres humanos u otras especies.

Por esa razón, hay necesidad de cuidarlos, como además pueden ser sometidos a procesos de investigación y resultar ser un alimento o cura para la humanidad, y la mejor muestra es lo que sucede con el escorpión (Rophalurus princep).

Preferencia

Ambas especies son nocturnas, rara vez aparecen durante el día y viven en pequeños grupos con sus crías.

Fósiles vivientes

Nelson García Marcano, biólogo y técnico de la Dirección de Biodiversidad, especifica que el solenodonte es un fósil viviente; sumamente primitivo, se alimenta de insectos y se considera que data de la época de los Dinosaurios y es de los mamíferos menos evolucionados, junto con la hutía.

“El solonodonte puede pesar hasta tres libras y su nombre viene del griego ‘Solonodon’ que significa diente acanalado, a través del cual segrega una saliva tóxica con que paraliza pequeñas presas como lagartos, no letal para gente”.

Mientras, agregó Nelson García Marcano, la hutía se alimenta de hojas, cáscaras y troncos de algunos árboles latifoliados, ambas inofensivas.