Al conocerse la semana pasada que el béisbol dominicano bajó tres lugares en el ranking mundial al pasar del noveno lugar al 12, las reacciones de inconformidad salieron a relucir de inmediato.
Incluso el editor deportivo de este periódico, Hugo López Morrobel, le dedicó su columna el viernes pasado, considerando como una afrenta para el béisbol dominicano caer por debajo de países como Holanda (7), Panamá (9) y Colombia (11), que no tienen la tradición en este deporte como nosotros.
Hugo señala que no hay ninguna excusa para justificar esa caída, porque ninguna explicación tiene forma de ser creíble y mucho menos entendida.
Otros colegas también se fueron en comentarios despectivos hacía la Federación Dominicana de Béisbol sin ningún reparo.
Créanme que me encantó leer, ver y escuchar a todos esos dolientes del béisbol emitir sus comentarios, siendo lo mejor que ninguno puede ignorar que por varios años le escribí con insistencia al exministro de Deportes, Francisco Camacho, sobre el error que cometía al no apoyar a los seleccionados dominicanos para que asistieran a los premundiales y mundiales de béisbol que organiza la WBSC o la Federación Mundial de Béisbol.
Y me dejaron solo.
Los puntos del ranking mundial se acumulan asistiendo a todos esos eventos. Recuerden que en 2022 la Confederación Panamericana de Béisbol (Copabe) multó a la Federación Dominicana con US$3 mil por ausentarse del torneo premundial sub-23, celebrado en la ciudad de Aguascalientes, México.
Y para los que llevan anotaciones, el país pudo haber caído más bajo del lugar 12, debido a que Camacho no quiso apoyar a los seleccionados que participaron en el premundial U18 y mundial U15, que se celebraron en julio y agosto pasado en Panamá y Colombia, respectivamente.
Los pasajes del U18 fueron pagados por Amaury Nina y los entrenadores y los del U15 por un acuerdo con el Grupo Panorama, que preside Miguel Medina, que en lo adelante promete cambiar la historia en ese sentido.