Santo Domingo.-Perder a un ser querido es doloroso, pero que un hijo pierda a su madre víctima de feminicidio, o a ambos progenitores en el hecho, puede ocasionarle algunos problemas de salud mental a esos vástagos que quedan huérfanos.

Y es que estos hijos resultan con heridas difíciles de sanar por lo dramático de la situación, generando en ocasiones traumas que aún salen a flote en la adultez.

El pasado presidente del Colegio Dominicano de Psicólogos, Jairo Mercedes, reflexiona que si es grande la herida, emocionalmente hablando, cuando hay una separación de los padres es todavía más enorme cuando ocurren casos de feminicidios, sobre todo, cuando esos hijos son testigos de la escena.

Es por esta razón que Mercedes considera que los traumas que presentan los hijos deben ser atendidos por el Estado, el cual debe diseñar una política para tratar a esos huérfanos por feminicidios.

La psicóloga Cades Silvestre manifiesta que estos niños quedan en un estado vulnerable, donde el principal problema es la depresión enmascarada por la etapa del duelo que atacará masivamente a ese hijo.

Coinciden en que los niños tienen sentimientos de abandono porque ya papá y mamá no van a estar ahí, además de rabia, y otros, sienten hasta culpa, lo que afecta seriamente su autoestima.

A esto se suma que pueden presentar agresividad, aislamiento y deserción escolar. Además, pueden crecer de manera intolerante y poco empáticos.

Ambos profesionales de la conducta destacan que la vida y mundo de los hijos, tanto de la víctima como del victimario, cambia y se va a pedazos de manera inesperada.

Carga social
En el caso de los hijos del victimario (cuando no son hijos de la víctima) pueden sufrir de acoso con comentarios despectivos en el colegio y el entorno, que lo podrían llevar a desarrollar fobia y a no querer salir de casa para que no lo señalen por las acciones del progenitor.

Entonces al trauma de la muerte de su papá se le añade la carga social, así como las informaciones que ve en las noticias y las redes sociales, esto último dependiendo de la edad.

Para Silvestre es imprescindible prestarle igual atención psicológica continua a estos hijos, para que la agresividad, violencia, intolerancia, maltrato físico y verbal, apatía y falta de apego, no sean desencadenantes de un posible trastorno de cualquier índole a futuro.

Falta de sueño
El aislamiento para evitar ser etiquetados o rechazados puede conllevar a que esos vástagos presenten insomnio, ansiedad y también pueden tener deserción escolar de manera parcial, es decir, mientras pase el duelo .

Otros detalles

—1— Necesario
Según expertos en salud mental, en la relación de pareja la confianza es esencial.
—2— Desde la raíz
Como sociedad, existe la urgencia de trabajar en el cambio de los modelos de crianza altamente violentos.
—3— Cifra
En lo que va de año en el país se han registrado 20 feminicidios.

Terapia psicológica es necesaria para los hijos
Esencial. Los especialistas de la conducta expresaron que no debe verse como una opción sino como una obligación que esos hijos que quedan en la orfandad asistan a terapias psicológicas.

Pues, como explica la psicóloga Cades Silvestre, con esta ayuda tratarán de mantener en equilibrio su salud mental para que así no tengan peores secuelas.

El psicólogo Jairo Mercedes aclaró que siempre se puede hablar de este tipo de problemas emocionales, si no se atienden estas personas con los especialistas de la conducta que les enseñan cómo sobrellevar la situación.